Escrito por Yasmine Zelaya 23 Julio 2013
Tegucigalpa, Honduras (Conexihon).- Los
defensores de Derechos Humanos Bertha Oliva coordinadora del Comité de
Familiares Desaparecidos en Honduras (COFADEH) y Juan Almendares
director del Centro de Prevención, tratamiento de las víctimas de la
tortura y Familiares (CPTRT) coincidieron en que “Honduras está viviendo
en un Estado de guerra”.
Para Oliva “Honduras está viviendo en
una constante guerra, que es desigual entre las armas militares y una
sociedad que quiere paz”. Por su
parte, Almendares sostiene que la violencia que vivimos los hondureños
se deba a “la intromisión militar, reforzada por los entes policiales
que han convertido al país en una tierra de asalto, en un Estado de
guerra contra el pueblo”.
Las declaraciones de ambos defensores
de derechos humanos ocurren en los momentos en que la sociedad hondureña
sigue impactada y sin dar crédito al trágico destino del periodista y
profesor universitario Aníbal Barrow, cuyo cuerpo fue desmembrado y
dispersado en los alrededores de una laguna en la región de Villanueva,
en el norteño departamento de Cortés.
A Barrow, de 65 años, lo secuestraron
el 24 de junio en la ciudad de San Pedro Sula, la capital departamental
ubicada 450 kilómetros al norte de Tegucigalpa, cuando se desplazaba en
un vehículo en compañía de familiares. Lo llevaron hacia los cañaverales
que rodean la laguna de la comunidad de Siboney, en Villanueva, donde
se encontraron sus restos 15 días después.
En su análisis sostienen que el
asesinato refleja que Honduras ingresó en un tipo de “asesinatos
selectivos”, en la que los periodistas aparecen como víctimas
predilectas para sembrar terror. Hasta la fecha unos 35 comunicadores
sociales han sido ultimados en Honduras, de los que 29 se han
registrado en los últimos tres años.
Asesinato y saña contra periodistas
Los defensores de derechos humanos
también coinciden en que la saña en la desaparición y asesinato del
periodista Aníbal Barrow el pasado 24 de junio se debe a una “campaña
para atemorizar a la población en especial los periodistas”.
“El objetivo final es atemorizar,
causar un pánico colectivo para que dejemos de hacer lo que hemos estado
haciendo a favor de la libertades y la vida a favor de las libertades
de expresión a la información por eso el sector que más han atacado son
los periodistas”, subrayó Oliva.
México al igual que Honduras es uno de
los países latinoamericanos más peligrosos para ejercer el periodismo
en esta nación se han reportado casos de secuestro, desmembramiento y
quema de cuerpos de periodistas.
Para Oliva el caso del periodista
Barrow es similar al patrón de muertes de periodistas mexicanos lo que
debe de llamar la atención del porque de la saña en muertes de
periodistas. “Es una política regional para atemorizar y someter a los pueblos, es algo que nos está casi paralizando”, agregó.
Temor en la población
De acuerdo con la coordinadora del COFADEH “el país está viviendo en una invariable declaratoria de guerra”. La
defensora de derechos humanos aseguró que las oficinas de COFADEH
suelen permanecer llenas de ciudadanos atemorizados que llegan a
presentar sus denuncias.
“Día a día llegan a esta oficina
personas atemorizadas por persecución políticas, atentados de muertes e
incluso personas que han salido del país como pueden por temor a ser asesinados”,
lamentó, al reprochar que en nuestro país operen libremente los
escuadrones de la muerte a vista y paciencia de las autoridades
hondureñas.
A su juicio la escalada de violencia
se ha incrementado debido a la inminente militarización y aportes
policiales nacionales y extranjeros en programas de seguridad del país.
El Gobierno extendió para finales de
abril el “estado de emergencia” decretado en el sistema de seguridad
pública ante la imparable ola de violencia y criminalidad que azota al
país.
La medida, que fue aprobada en Consejo
de Ministros, permite ampliar el período de apoyo de las Fuerzas
Armadas a la Policía Nacional en las acciones de combate contra la
delincuencia común y organizada facultando a los miembros de las Fuerzas
Armadas a continuar realizando operaciones de seguridad en las calles
con las mismas funciones de la Policía hasta el 27 de enero de 2014.
Escenario geopolítico
“En Honduras hay un escenario
geopolítico que ha sido utilizado en defensa de los intereses del
pentágono, hay un incremento de bases militares, hay un incremento de la
presencia de la policía Colombiana y tratados militares entre Estados
Unidos y Honduras” señaló Almendares. Al
acompañamiento militar se suma que el Estado hondureño ha creado
cuerpos de inteligencia militar, lo que provocaría una mayor represión
contra del pueblo tal como ha ocurrido en otros países del área,
comentó.
En ese marco, las autoridades no
hablan con la prensa desde hace dos meses y solo informan a través de
comunicados oficiales, en los que no se registran los asesinatos. Honduras
registra un promedio diario de 20 asesinatos y su tasa anual de
homicidios llegó en 2012 a 85,5 por cada 100.000 habitantes. Sin
embargo, la Secretaría (ministerio) de Seguridad ha anunciado que la
meta para este año es bajar a 80 asesinados cada 100.000 habitantes.
No hay comentarios :
Publicar un comentario