Después del crimen de la compañera Berta
Cáceres, el estado hondureño, bajo la dirección dictatorial de Juan
Orlando Hernández, se dispone a ejecutar el desalojo de las personas que
se ganan la vida vendiendo el Mercado Central Lenca de Intibucá.
La
resolución del desalojo es absolutamente ilegal y la Corte de Apelaciones de Comayagua, siguiendo la consigna política del Partido Nacional que ha seguido fielmente el Juzgado de Letras de Intibucá, al
igual que la Fiscalía de Intibucá, sin tomar en cuenta lo siguiente:
1.- Se realizó un cabildo abierto en el que el pueblo determino que el mercado siguiera funcionando en el mercado histórico.
2.-
El mercado está ubicado en los territorios indígenas del pueblo de
Intibucá, según consta en el título ancestral denominado
Eramaní y la
municipalidad para usurpar ese bien se vendió así misma dicho predio, en
un acto ilegal.
3. La municipalidad de Intibucá dirigida por el
incapaz Javier Martínez es de otro municipio y lo que busca es la
entrega de este predio para intereses foráneos sin importar que esto
traerá un tremendo levantamiento popular.
