Nils Castro
ALAI AMLATINA, 10/03/2015.-
El repentino despropósito de que la
Casa Blanca declare emergencia nacional alegando que la seguridad y
la política exterior de su país están amenazadas por Venezuela, ha
causado una coyuntura inaudita. Semejante argumento ofende la
sensibilidad y la inteligencia de millones de latinoamericanos y
abochorna a millares de ciudadanos pensantes en Estados Unidos. De
nada vale la mojigata explicación de que con tal iniciativa se
cumple un requisito legal norteamericano. No por eso deja de ser una
torpeza que vuelve a dejar mal parado al presidente Obama, también
ante sus asociados europeos, que rápidamente se han distanciado de
ese discurso y sus inevitables consecuencias.
El contexto de este malpaso estadunidense es la contraofensiva que
la derecha venía empujando en América Latina por medio de un puñado
de viejos y nuevos métodos. Estos coinciden en desacreditar
gobiernos legítimamente electos para derrocarlos de una u otra forma
y, acto seguido, instaurar un orden “constitucional” a su gusto,
mediante escenificaciones electorales propias de una “democracia”
reducida a orquestar comicios periódicos que así lo mantengan y
reproduzcan. Eso no se inventó ayer; así le serrucharon el piso a
Getulio Vargas, a Perón y a Salvador Allende, entre otros. Pero ayer
como hoy, todos sabemos que ese género de campañas no funciona
localmente sino a escala global: para implementarla se necesita
conspicuo apoyo político, logístico y mediático estadunidense.
Para dorar la píldora, la jerga diplomática de Obama a eso ahora lo
denomina “transición”. Últimamente los ejemplos han evolucionado de
unos golpes bastante burdos como los perpetrados en Honduras y
Paraguay a operaciones metódicamente más sofisticadas, con
importantes componentes mediáticos que luego inducen movilizaciones
sociales supuestamente no partidistas y hasta no políticas, como
está haciéndose en Argentina y Brasil.
En Venezuela el mismo esquema se aplicó desde los inicios del
proceso revolucionario chavista. Las campañas mediáticas de los
primeros años instigaron movilizaciones “apolíticas” y culminaron en
un cruento golpe de estado. Luego, tras la elección de Nicolás
Maduro, reprodujeron el esquema suponiendo que sin Chávez eso podía
resultar. Pero tal conspiración, con sus “guarimbas” solo causó más
muertes, destrozos y descrédito sin cumplir el objetivo de
defenestrar el gobierno por medios no electorales. Fiasco que el
reciente complot tampoco logró remontar.
Esta reiteración de fracasos deformó el modelo hasta volverlo
contraproducente. Venezuela está en vísperas de elecciones
legislativas a las que la derecha irá escindida entre quienes se
obstinan en repetir la intentona golpista y quienes buscan un relevo
constitucional. Si la oposición ganase, el Congreso podría convocar
un referéndum para revocar el actual mandato presidencial.
Sin embargo, en el momento más inoportuno este traspié de Obama pone
a la vista todas las cartas de Washington como protagonista visible
de la crisis venezolana, destruyéndole la excusa de que los
problemas y conflictos existentes en Venezuela se debían al malestar
causado por desaciertos de su propio gobierno. Al hacerlo, desnuda a
Estados Unidos como potencia intervencionista en las antevísperas de
la venidera Cumbre de las Américas, donde la normalización de las
relaciones ofrecía una notable oportunidad de reacercamiento con
América Latina.
En medio de los graves líos en que Washington sigue envolviéndose
alrededor del mundo, el presidente norteamericano estropea lo poco
que parecía listo para salir bien. Hay dos figuras que eso recuerda:
la del torpe que emborrona con el codo la fina caligrafía que una
vez logró trazar, o la del rey que desfila desnudo ante la multitud…
con la diferencia de que este monarca se desviste a si mismo sobre
la marcha.
- Nils Castro es escritor y catedrático panameño
URL de este artículo: http://www.alainet.org/active/81375
Mas informacion: http://alainet.org
RSS: http://alainet.org/rss.phtml
Twitter: http://twitter.com/ALAIinfo
Te invitamos a sostener el trabajo de ALAI.
Contribuciones: http://alainet.org/donaciones.php
______________________________________
Agencia Latinoamericana de Informacion
email: info@alainet.org
Suscripciones: http://listas.alainet.org/listas/subscribe/alai-amlatina
Desuscripciones: http://listas.alainet.org/listas/signoff/alai-amlatina
martes, 10 de marzo de 2015
De Washington a Caracas, el rey se desnuda
Suscribirse a:
Enviar comentarios
(
Atom
)
No hay comentarios :
Publicar un comentario