TEGUCIGALPA.- Con la
interpretación del Aleluya del compositor alemán Georg Friedrich Händel
por parte de la Orquesta de Cámara de la Universidad Nacional Autónoma
de Honduras (UNAH) y en medio de múltiples muestras de pesar, fue
despedido ayer el joven Rafael Alejandro Vargas Castellanos, hijo de la
rectora del Alma Máter, Julieta Castellanos, en Jardines de Paz Suyapa.
Las muestras de condolencia de los
asistentes a las honras fúnebres se mezclaron con el repudio del crimen y
el clamor unánime de no más impunidad en el asesinato de jóvenes. La
sociedad, principalmente la intelectual, se sumó al dolor de la rectora
Castellanos y sus familiares.
El sepelio inició con una misa de cuerpo
presente en santuario de Suyapa, oficiada por el cura párroco Hermer
Sorto junto al capellán de la UNAH, Juan Ignacio Sepúlveda, quien pidió a
Dios el bálsamo del consuelo para los dolientes. “El único que llega
hasta el fondo es Dios, el único que puede dar respuestas, que puede
sostenernos, que nos puede dar mejores motivos para esperar, es Dios”,
señaló durante la homilía el padre Sepúlveda.
“Reciba nuestras condolencias, nuestro
cariño, igual esta grandísima demostración de cercanía y de afecto, que
el señor le consuele, le dé fortaleza, que el amor de sus hijos, allí
usted flanqueada por ellos, que ese sea el amor que la sostenga, de sus
amistades, compañeros familias”, le expresó el sacerdote a Castellanos.
Mientras que a los hijos de la doctora
Castellanos les dijo: “A ustedes muchachos a seguir adelante con su
mami, apoyándola, cobijándola siempre con el amor; no es tiempo de
revanchas, de odio porque el odio puede causar el dolor a otros, el odio
destruye al otro, destruye al que entre allí, el que odia es como una
fiera irracional, no piensa”.
Posteriormente el sacerdote bendijo los
restos mortales del joven Rafael Alejandro, y media hora después el
féretro fue conducido a su última morada, en medio del dolor de su madre
y demás familiares.
 |
|
El dolor de madre le dio fuerza a la doctora Julieta Castellanos para
cargar el féretro que llevaba a su última morada al fruto de sus
entrañas. |
IMPUNIDAD
“La familia Vargas Castellanos queremos
darles gracias a todos ustedes por acompañarlos en este momento,
queremos aprovechar la oportunidad para decirle a las autoridades
competentes que este crimen de estos jóvenes ilustres no quede impune”,
expresó uno de los dolientes que subió al púlpito para agradecer la
masiva presencia de solidaridad.
A este familiar se unió el clamor de
autoridades universitarias, políticos, trabajadores universitarios,
alumnos, funcionarios y ex empleados que asistieron al entierro, ya que
pidieron a las autoridades el esclarecimiento de tanto crimen que abate
al país, y no solo por ser el hijo de la rectora universitaria, sino de
los muchos que se producen a diario.
Pasadas las 3: 00 de la tarde el féretro
fue trasladado al campo santo, donde amigos, autoridades de la
Universidad y familiares expresaron sus muestras de pesar, de
solidaridad y respeto que embarga a la doctora Castellanos.
ASESINADO
Rafael Alejandro Vargas Castallenos,
estudiante avanzado de la carrera de Sociología y su amigo Carlos David
Pineda Rodríguez, quien cursaba el último año de la carrera de Derecho,
ambos alumnos de la UNAH, aparecieron asesinados el sábado anterior el
kilómetro 12 sobre la carretera al sur. El joven Pineda Rodríguez
recibió cristina sepultura la tarde del domingo en el cementerio San
Miguel Arcángel.
LA FRASE
“Aquí tenemos pedir un basta ya a la
impunidad y a la injusticia, pidamos una muy pronta investigación que
conlleve a conocer a los criminales de tan horrendo crimen que han
cometido en contra de estos dos jóvenes, aquellos otros que de alguna
manera u otra pierden sus vidas a consecuencia de la criminalidad”: Ricardo Álvarez, alcalde capitalino.
No hay comentarios :
Publicar un comentario