“Son
cosas chiquitas. No acaban con la pobreza, no nos sacan del
subdesarrollo, ni socializan los medios de producción y de cambio…
Pero quizá desencadenen la alegría de hacer y la traduzcan en
actos”.
Eduardo
Galeano 1940 – 2015.
La Red
Nacional de Defensoras de Derechos Humanos en Honduras
preocupadas por la campaña de desprestigio montada desde el Régimen,
coludida con todo el aparato mediático, religioso y sus fuerzas
policiales y militares, para colocar en la idea de las mayorías que
quienes defendemos los derechos humanos, sea el que fuere, Defensoras
y Defensores no somos personas
dignas, sino más bien las provocadoras de la actual situación de
crisis que como sociedad vivimos; nos pronunciamos condenando tal
acto temerario que es el reflejo de una Dictadura que extiende sus
tentáculos para pretender apabullar el descontento que crece y se
refleja en luchas.
Sabedoras de la capacidad de análisis lograda por el pueblo, de la
forma en que cada vez más y más gente se pregunta sobre su entorno
y alcanza discusiones políticas que superan su pertenencia
partidaria y que se involucran, incluso de manera simultánea, a
otras formas de organización legitimas para la defensa de sus
derechos como pueblos apoyándose en la fuerza que ha representado la
comunicación a través de las radios comunitarias y las redes
sociales con contenidos alternativos de información, de los avances
que en las prácticas cotidianas de la lucha van forjando a
defensoras y defensores que a falta de formación académica negada
por tanto mal gobierno, desarrollan herramientas, habilidades,
discursos, emprendimientos, autonomías, propuestas, formas de
organizarse política y económicamente que efectivamente desafían
al modelo capitalista patriarcal, y vamos de a poco refundando la
vida y nuestros sueños, generando solidaridades y articulaciones a
nivel nacional e internacional como pueblos.
No
nos intimida el Régimen, lastimosamente hay una realidad que nos
afecta de manera mas directa cada vez y ésta no podrá desmentir sus
estadísticas de reducción de la pobreza, de la delincuencia, de la
violencia, que siempre han sido manipuladas.
Invocamos al poder que representan nuestras sabidurías populares,
nuestros conocimientos ancestrales, nuestros instintos de
sobrevivencia marcados por la solidaridad entre personas que nos
hacen sortear el cotidiano con alegría, con dignidad, con
creatividad e ironía porque buscamos una forma de superar el luto
colectivo de tanta vida inocente arrebatada por el ansia de poder de
esa pequeña clase oligarca extrativista, pordiosera del norte que
voltea sus ojos, no al cielo, sino a un poder transnacional que les
dice cuánto y cuándo.
Denunciamos sus campañas de desprestigio, al mismo tiempo que
redoblamos nuestras luchas por la defensa de nuestro derecho a
defender derechos desde nuestra propuesta y fuerza de mujeres y
feministas que ha sido siempre vital, tan desafiante como
esperanzadora.
Tegucigalpa,
15 de Abril de 2014.
!NO MÁS CRIMINALIZACIÓN A DEFENSORAS DE DDHH¡
No hay comentarios :
Publicar un comentario