martes, 20 de octubre de 2015

Honduras: Denuncio amenazas contra mi vida en este Estado criminal

Ricardo Ellner
Quiero expresarme ante los dignos pueblos de Honduras así como ante todos los demás en el resto del mundo, sobre la agresión y amenaza de la cual he sido víctima la tarde de hoy por mi clara posición periodística de estar en favor de las reivindicación de nosotras y nosotros, es decir las amplias mayorías de nuestra Patria y en consecuencia a la construcción de una liberada Patria Grande Latinoamericana. 
Hoy 20 de octubre en el recorrer de 2015, me dirigía a seguir trabajando en una nueva publicación, esto, en la localidad de un café en Tegucigalpa, Honduras. Al bajarme del automóvil, al estilo más irracional que sólo las películas de ciencia ficción y en un país demacrado y sin democracia como lo es en este momento Honduras, fui cercado por dos motocicletas que transportaban a un individuo cada una.
Con el auto ya aparcado, sus palabras directas fueron “vos hijueputa” mientras terminaba de sacar la computadora donde tengo parte de mis escritos. Al voltear, volvió a decir el amedrentador “si vos hijueputa, hablas mucho” en tanto que el segundo con la moto un poco más distanciada apuntilló “te vamos a cortar la lengua”.

Arrancaron sus motocicletas acelerando con su máxima potencia ensordeciendo a las pocas personas que ahí se encontraban.
Es duro encontrarse cara a cara con los amedrentadores y asesinos, los nervios se empoderaron de todo mi cuerpo, pero quiero aprovechar en este espacio público para referir ¡QUE NO TENGO MIEDO!

Ojos internacionales y luchador@s nacionales no podemos dejar de expresar que es lo que ocurre en un país tan bello como Honduras pero masacrado por la tradicional política.

Asimismo, quiero responsabilizar en caso de daños físicos en contra de mi persona o bien de mi familia o amistades cercanas, a este gobierno nacionalista que encabeza el señor Juan Hernández, que lo único que busca, a claras luces, es profundizar el empobrecimiento, ampliar la desigualdad, gobernar con políticas de terror y para lograr el silencio de las mayorías que somos quienes exigimos paz, justicia y libertad.

No estoy dispuesto a dar un paso atrás, no estoy dispuesto a silenciarme ante tanta injusticia y opresión que llega desde quienes administran al ya deteriorado Estado. Ya han sido 58 las y los comunicadores que han sido asesinados desde el Golpe de Estado en 2009  a la fecha y el reclamo popular sigue vigente.

Sólo en un país donde no se vive en libertad crean leyes de protección a comunicadores, defensores de derechos humanos y profesionales del derecho, misma que sólo era requisito para un examen periódico universal y no para la finalidad que se creó.

Podrán asesinarme pero no obtendrán mi silencio. Podrán amedrentarme pero no lograrán que incline mi cabeza. Seguiré denunciando, cada vez con más fuerza, uno y otro episodio de injusticia, corrupción, impunidad que esta administración cometa.

Podrán cortar mi lengua, pero mi alma libertaria seguirá intacta.
Ricardo Ellner
Periodista
20/oct/15
                                                           

No hay comentarios :

Publicar un comentario