Punto de vista de un desterrado
colombiano
Por: Valmern – Vozcol
Octubre 18 de 2012 –
No.004
En el marco del gran escenario de diálogos y
búsqueda de caminos de paz, justicia, democracia, soberanía
y dignidad de patria, se encuentran dos poderosas fuerzas con intereses y
objetivos completamente diferentes.
La primera de estas fuerzas está constituida,
en esencia, por las grandes mayorías populares del campo y de la
ciudad, por quienes desde hace ya muchos años vienen siendo
explotados, despojados y violentados en todos sus derechos cuando hacen
sentir su voz, levantan su puño y deciden defender sus derechos
mediante el desarrollo de crecientes niveles de unidad, de
organización y de movilización.
Con esta enorme y decisiva fuerza social y de
masas están los que, con expresiones patrióticas y
progresistas, han mostrado interés en encontrarse al lado de la
construcción de una patria de todos y para todos. La segunda de
estas fuerzas está constituida, fundamentalmente, por el poder
injerencista e intervencionista imperial, por la clase dominante
tradicional y emergente, por los sucesivos gobiernos de
turno.
En este orden y para la primera de las fuerzas, es
vital y determinante el desarrollo de la unidad y la generación
masiva de conciencia social y política. Contrariamente y para la
segunda fuerza, la unidad, la organización y la lucha del
movimiento social y de masas; la unidad, la organización y la
lucha de las fuerzas de la real izquierda, patrióticas y
democráticas, son vistas y consideradas, por los dueños del
poder, como actos y manifestaciones de “subversión”
contra los que debe dirigirse todo el poder mediático, todo el
poder represivo y toda la fuerza de la manipulación.
Es en el campo natural, en el de las grandes
mayorías del país, que se han librado, se están
librando y se librarán las más importantes batallas por la
paz, la justicia y la felicidad. Aquí, en este campo y en
desarrollo de la unidad de acción, se mueven las más
variadas experiencias y expresiones de lucha en favor de derechos y de
reivindicaciones.
Es en escenarios, como el de los diálogos, que
los de arriba hacen todo cuanto les es posible para imponer, mediante la
fuerza bruta, la mentira y el engaño, unas reglas de accionar que
les permita cambiar sin cambiar, asegurando así el control y
manejo de sus grandes intereses y privilegios. Es en escenarios, como el
de los diálogos, que las grandes mayorías del país
necesitan desarrollar toda la fuerza y potenciales generados por la
unidad. Es en escenarios como el de los diálogos, que los
dueños del poder intentan disputarle el movimiento social y de
masas, a las fuerzas que luchan por la paz, la justicia, la
soberanía y la dignidad.
¿Quién podrá entender el juego de
los ayer amigos de la guerra y hoy y enemigos de la paz?
(Hasta la próxima)
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Familias en acción, las limosnas del poder o las técnicas del biopoder
Escrito por Horacio Duque
Giraldo
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Bajo un ardiente sol y 40 grados sobre cero, los
pobres forman enormes colas desde la madrugada para suavizar las consecuencias de la extrema pobreza producto del neoliberalismo. |
Por Horacio Duque
Hay revuelo entre los pobres, entre miles de
familias del Sisben 1, de desplazados e indigenas porque se acaba el
tiempo para registrarse ante el Departamento Administrativo para la
Prosperidad Social, el super Ministerio de Santos para el control de 28
millones de colombianos en condiciones de miseria.
En Bogotá, donde la super
millonaria Gina Parody es la gran benefactora, en Cúcuta, en
Medellin, en Armenia, en Barranquilla, las mujeres hacen interminables e
inhumanas colas para recoger estas migajas del poder oligárquico,
antes de que se venza el tiempo.
Familias en Acción es un programa de subsidios
estatales que se inició con el Plan Colombia, durante el gobierno
de Andrés Pastrana, como un componente de la
guerra contrainsurgente financiado por las Fuerzas Armadas de
los Estados Unidos y el Comando Sur, contra la población campesina
y la resistencia agraria revolucionaria.
Recientemente fue oficializado por el poder
legislativo con la Ley 1532 de junio 7 de 2012. Tiene 15 artículos
y su vigencia presta méritos para acciones legales ante los jueces
y tribunales constitucionales. Bien puede ser que abogados progresistas
incoen acciones ante la Corte Constitucional en la perspectiva de la
esencia de los derechos humanos fundamentales y universales.
Familias en Acción es un subsidio monetario
mínimo que se entrega por el gobierno a familias del Sisben 1, a
familias desplazadas y a familias indígenas, para atender
necesidades educativas y de salud. Un componente central es la
identificación de las personas por la vía de la
bancarización y registro en las redes del sistema financiero.
Quiere decir que los pulpos bancarios capturan parte de dichos dineros
por la vía de sus administración.
Familias en acción son las limosnas del
poder oligárquico.
Es la expresión de las tecnologías
neofascistas (santistas) del poder. Es el biopoder que emerge desde la
fantasmatica hitleriana que implica el uso de numerosas y diversas
técnicas demográficas y biológicas para someter y
controlar la población, mediante la regulación de la
familia. Es parte esencial del funcionamiento del Estado de la
oligarquía neofascista colombiana, que simula una mutación
desde las masacres, las desapariciones, los magnicidios, el
desplazamiento (de 6 millones de seres humanos), la tortura, la
cárcel y demás recursos de la violencia, hacia cierta
aparente condescendencia con los pobres de la nación que es la
tercera en inequidad por todo el planeta.
Familias en acción o la repugnante limosna del
poder que consiste en la entrega condicionada o periódica de una
transferencia monetaria miserable para completar dizque el ingreso y
"mejorar" la salud y educación de los
miserables.
Es la reproducción de una subjetividad de los
mínimos con seres de segunda categoría para apalancar
la reproducción del poder de la casta privilegiada que domina la
sociedad.
Hay que construir una
subjetividad de la dignidad para que el poder popular sea una
realidad.
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