Los
procesos penales contra estudiantes universitarios que reclaman un diálogo
abierto y respetuoso a las autoridades de la Universidad Nacional Autónoma de
Honduras, UNAH, es una acción que agudiza la situación deteriorada de libertad
de expresión en esa institución educativa.
Pen
Honduras como una organización que promueve la libertad de expresión en
Honduras y el respeto a los diversos pensamientos como una condición clave para que se fortalezca una democracia,
considera oportuno hacer una llamado a la máxima autoridad de la UNAH, la
rectora Julieta Castellanos, para que reflexione sobre el impacto que tiene la
criminalización de la protesta social como forma de libertad de expresión. Los
procesos penales tienen por objeto silenciar las voces disidentes, pero lejos
de resolver el problema lo profundiza.
Tal
como ya lo decía nuestro presidente mundial John Ralston, de Pen Internacional,
en una carta enviada a la rectora Castellanos, que sería una buena muestra de liderazgo
el permitir los diversos pensamientos en la universidad.
Las
denuncias contra los liderazgos estudiantiles que han derivado en
requerimientos fiscales y órdenes de captura a partir de este jueves 16 de
julio de 2015, ha colocado a unos 34
estudiantes en los tribunales de justicia en total indefensión pues el sistema
de justicia está cometiendo graves violaciones al Debido Proceso, al Derecho a
la Defensa en igualdad de condiciones y el acceso a la justicia de los
encausados.
Nos
preocupa que la situación está salida del cauce, ha habido desde hace varios
meses, en especial desde julio del año pasado, expulsiones y procesos
judiciales contra estudiantes a quienes se les ha levantado una campaña de
desprestigio que lacera sus derechos humanos.
Igualmente
es preocupante el anuncio de un desalojo forzoso que se estaría realizando este
domingo 19 de julio, a primeras horas de
la mañana, el cual violentaría la Ley.
De producirse esta acción traería violencia de los cuerpos de seguridad del
Estado contra los y las jóvenes que mantienen tomado el edificio central de la
universidad, por lo que responsabilizamos desde ya por las consecuencias de
esta acción irresponsable a la rectora Castellanos; al Poder Judicial, al
Ministerio Público, a la Policía Nacional y Militar.
Por
lo anteriormente expuesto demandamos lo siguiente:
A las autoridades universitarias:
-Permitir
la apertura de un diálogo respetuoso y
abierto para iniciar a abordar la
problemática universitaria
-Respetar
la integridad y dignidad de los liderazgos estudiantiles poniendo fin a la
campaña de estigmatización que está en curso.
-Dar
marcha atrás a las acciones de criminalización de la protesta social como una
muestra de conciliación para una crisis que está desbordada.
Al Ministerio Público:
Le
demandamos imparcialidad y proceder a investigar con la misma prontitud que actuó
con la de las autoridades universitarias, a investigar otra denuncia que se había
presentado desde febrero anterior para que se investigara por Abuso de
Autoridad a la señora rectora Julieta
Castellanos en el caso de seis estudiantes expulsados y que fueron reintegrados
por órdenes de la Corte Suprema de Justicia. Tres de ellos están encausados en
estos momentos por la UNAH por el Delito
de Detentación de Edificios Públicos, evidenciado el enfoque hacia estos
jóvenes que han demandado junto a miles de sus compañeros un diálogo como forma
civilizada de resolver la problemática en la UNAH.
Al Poder Judicial:
-Aplicar
de forma imparcial la justicia sin prejuzgamientos de ninguna clase y teniendo
como norte la Ley y los convenios y
tratados internacional que protegen la libertad de expresión
-Respetar
el Debido Proceso y el Acceso a la Justicia de los estudiantes a quienes se les
ha girado requerimientos fiscales y órdenes de captura.
Promovemos
la libertad de expresión , luchando contra la impunidad, celebrando la
literatura
Junta
Directiva
Centro
Pen Honduras
Tegucigalpa
M.D.C, 18 de julio de 2015
No hay comentarios :
Publicar un comentario