telesurtv.net / 15.08.2014.
Mi
sensibilidad y solidaridad ante el sufrimiento histórico del pueblo judío
comenzó de niño en mi propia casa cuando me contaban los horrores del nazismo en
la Segunda Guerra Mundial.
Durante
mi adolescencia, ese sentimiento se consolidó. Estudié mucho sobre el tema y
con ojos desprevenidos e inocentes leí novelas de Leon Uris, entre ellas, “Mila
18”, cuyo título corresponde a la dirección del Cuartel General de la
Insurrección de los judíos polacos contra el opresor nazi en el ghetto de
Varsovia (irónico: Mila en polaco se pronuncia /miua/ que significa simpática).
Mi carrera diplomática comenzó en Polonia y allí, en Mila 18, hay un monumento
ante el cual se arrodilló en los años setenta el Canciller Federal alemán Willy
Brandt, como pidiendo perdón por los crímenes de las SS y La Gestapo.
Hoy
Gaza parece una repetición desgraciada de la historia. Hasta 1492, convivían en
España judíos, cristianos y musulmanes, fue un sueño de tolerancia frustrado por
los reyes Isabel “La Católica” y Fernando de Aragón. Entonces, los moros fueron
derrotados militarmente después de 800 años en España y los judíos arrancados de
sus hogares después de 1300 años y expulsados a la diáspora, pero en su
desgracia encontraron protección en los países musulmanes del Cercano y Medio
Oriente.
En
1948, los palestinos fueron echados de sus tierras por los israelitas,
¿¿!!Castigados por los crímenes nazis!!??
En
Polonia, visité el campo de concentración de Auschwitz, un museo del horror,
macabro. Recorrí galpón tras galpón; en uno, un depósito de maletas de las miles
y miles de víctimas, con las etiquetas y marcas de sus lugares de origen; pasé a
otro galpón, el depósito de anteojos y me conmoví, luego al siguiente,
atiborrado de prótesis y mi alma asaltada por el horror pero, finalmente, en el
último galpón, estallé en lágrimas al entrar al depósito de juguetes y ropas de
niños; entonces me dije: ¡NUNCA MÁS!.
Meditando
sobre Gaza, una visión horrible sobre el sufrimiento del pueblo palestino viene
a mí. Al ver las imágenes de niños descuartizados por la metralla israelita o
sobrevivientes mutilados o desfigurados por el implacable invasor habría que
preguntarse si los sicópatas militaristas de Israel, causantes de terremotos
ininterrumpidos, los de los drones y el fósforo blanco contra la población
civil, escuelas, refugios y hospitales palestinos están igualando en crueldad a
los genocidas que causaron el holocausto judío. Es así que en este agosto del
2014 no puedo derramar menos lágrimas por los niños palestinos que las que
derramé antes por los niños de Auschwitz.
¿A
quién se le podría haber ocurrido que la élite militarista de Israel iba a estar
ejecutando estrategias de pogroms, de diáspora, de ghettos, de exterminio y de
solución final contra un pueblo inocente que es su hermano desde los tiempos
bíblicos? Eso clama la ira de Dios, pero también nos hace llamar a todos los
judíos del mundo a protestar y levantarse contra los monstruos que gobiernan el
Estado de Israel.
La
historia del pueblo judío en retrospectiva nos lo muestra solidario siempre con
las causas más progresistas...Karl Marx, Rosa Luxemburgo, León Trotski, Hannah
Arendt , Irving Berlin, los mártires judíos en la lucha por los derechos civiles
en Los Estados Unidos o contra las dictaduras militares de Sur América, Albert
Einstein, el Premio Nobel Joseph E. Stiglitz, Noam Chomsky, Oliver Stone, Woody
Allen, Jacobo Timmerman, Ariel Dorfman, Steven Spielberg, Sigmund Freud, entre
tantos, son algunos de los héroes o genios que ha dado el pueblo judío a la
humanidad; por eso tenemos que denunciar los recurrentes crímenes de desprecio
racial o cultural cometidos por los gobiernos de Israel; razón para confiar en
que más temprano que tarde nuestros propios hermanos judíos torcerán el brazo de
los asesinos que hoy matan en su nombre.
Fecha
de publicación 15 agosto 2014
http://www.telesurtv.net/opinion/Del-ghetto-de-Varsovia-al-ghetto-de-Gaza-hacia-el-holocausto-palestino-por-la-ruta-del-nazionismo-20140815-0050.html
No hay comentarios :
Publicar un comentario