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| La muerte de los periodistas sigue en la impunidad por falta de investigación, según C-LIBRE. |
Fuente: Tiempo.hn
TEGUCIGALPA.-
El año pasado se registraron seis asesinatos de periodistas que dejan
un “silencio mortal como máxima censura” a la libertad de expresión,
apunta un reciente informe del Comité por la Libre de Expresión
(C-LIBRE).
El documento establece que en 2011 se configura un panorama de
irrespeto, negligencia, instalación del miedo, impunidad, insensatez y
desconocimiento por algunos funcionarios de alto rango. “La situación
se ve agravada por los efectos derivados del golpe de Estado, al
considerarse que, de las agresiones denunciadas desde el 2009, es casi
nula, o no existe ninguna acción investigativa policial y judicial”,
señala.
La investigación señala que el año pasado ocurrieron 98 agresiones a
periodistas, comunicadores, sistema, medios y grupo de periodistas. “Se
recopilan 115 casos de actos agresores contra la libertad de expresión,
de prensa, entre las que se podrían observar unas 473 tipologías de
agresiones directas contra las víctimas”, según el informe. Registra la
muerte de seis periodistas, una mujer y cinco hombres, así como el
perpetrado al analista Alfredo Landaverde. C-LIBRE señala que en 66 de
las denuncias, los agresores resultaron ser agentes estatales, entre
ellos 10 con rango superior.
AGRESIONES
La organización indica que las declaraciones coinciden en que las agresiones recibidas configuran mecanismos que buscaron impedirle a la víctima recopilar la información que pretendía obtener y darla a conocer. “Los atributos de supuesta causa, las informaciones, bloqueadas o restringidas, por agresiones a la libertad de expresión, tiene en común el ser vistas como derivaciones relacionadas a asumir posturas críticas sobre medidas del gobierno, acciones cuestionables de militares, policiales, empresarios, religiosos y de grupos de poder”, expresa.
La organización indica que las declaraciones coinciden en que las agresiones recibidas configuran mecanismos que buscaron impedirle a la víctima recopilar la información que pretendía obtener y darla a conocer. “Los atributos de supuesta causa, las informaciones, bloqueadas o restringidas, por agresiones a la libertad de expresión, tiene en común el ser vistas como derivaciones relacionadas a asumir posturas críticas sobre medidas del gobierno, acciones cuestionables de militares, policiales, empresarios, religiosos y de grupos de poder”, expresa.
Según el documento estos resultados dejan ver un ambiente restrictivo,
cruel y hostil hacia el ejercicio de la libertad de expresión. El
organismo defensor de la libertad de expresión registra la muerte de 24
periodistas en la actual administración, entre ellos los dos recientes,
Erick Martínez y Alfredo Villatoro Rivera.
PERIODISTAS MUERTOS EN 2011:
1-Héctor Francisco Medina Polanco.
2-Adán Benítez.
3-Nery Jeremías Orellana.
4-Medardo Flores.
5-Luis Ernesto Mendoza Cerrato.
6-Luz Marina Paz Villalobos.
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Informe revela que 115 comunicadores hondureños fueron agredidos durante 2011
PERIODISTAS MUERTOS EN 2011:
1-Héctor Francisco Medina Polanco.
2-Adán Benítez.
3-Nery Jeremías Orellana.
4-Medardo Flores.
5-Luis Ernesto Mendoza Cerrato.
6-Luz Marina Paz Villalobos.
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El director ejecutivo de C-Libre, Héctor Longino
Becerra, expresa que “en el año 2011, el mayor agresor a la libertad de
expresión fue el Estado, instituciones como la policía, las Fuerzas
Armadas de Honduras, incluso funcionarios públicos obstaculizaron la
libre labor de darle cobertura a un hecho social o político”.
Redacción central / EL LIBERTADOR
Tegucigalpa. El Comité por la Libre Expresión
(C-Libre), presentó el informe Libertad de Expresión 2011, el cual
destaca las agresiones a 115 comunicadores sociales a nivel nacional.
El informe denominado “Silencio Mortal Máxima Censura”, contabiliza 51
agresiones a periodistas –estudiantes y licenciados en periodismo–, a 10
comunicadores sociales –la persona que hace uso de un medio de
comunicación para informar–, camarógrafos, gerentes y propietarios de
medios de comunicación.
El director ejecutivo de C-Libre, Héctor Longino Becerra, expresa que
“en el año 2011, el mayor agresor a la libertad de expresión fue el
Estado, instituciones como la policía, las Fuerzas Armadas de Honduras,
incluso funcionarios públicos obstaculizaron la libre labor de darle
cobertura a un hecho social o político”.
Entre las estadísticas que se presentan, canal 36 cuenta con el número
más grande de agresiones a sus periodistas, sumando un total de 11
ataques solo de enero a diciembre de 2011.
Durante el años pasado, cinco comunicadores sociales fueron asesinados:
10 de mayo Héctor Medina Polanco, 4 de julio Adán Benítez, 14 de julio
Nery Orellana, 8 de septiembre Medardo Flores y 6 de diciembre Luz
Marina Paz.
“El Estado debería ofrecer un informe transparente científico, sobre la
situación de los periodistas que han sido asesinados; así como se han
capturado a los victimarios de Alfredo Villatoro, también necesitamos
que se asuma una posición para la investigación de todos los
comunicadores asesinados”, argumentó Becerra.
Entre los agresores al ejerció de la libre expresión se encuentran,
miembros de la Policía Nacional, Guardia de Honor Presidencial, agentes
de la Dirección General de Investigación Criminal (DGIC), militares y
diputados.
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