Hasta ahora no existía una tendencia que adversara de manera frontal y radical
el quehacer de la Junta Directiva del
Colegio de Abogados, ha significado entonces un primer intento por desafiar el
poder establecido y arraigado de la oligarquía hondureña que desde el interior
de dicha Junta controla los procesos jurídicos del país.
Es muy loable no sólo el hecho de haber participado, sino el
valor, la gallardía y arrojo revolucionario del Abogado Flores Lanza y todos
los que le acompañaron en esta primera escaramuza por la toma del poder. Claro que sí, esta lucha representa eso, la
lucha por la toma del poder, el poder institucional. Este proceso eleccionario
debe convertirse para el FNRP, para el Partido LIBRE y para los movimientos
sociales de Honduras en una luciérnaga que alumbre el camino hacia la toma del
poder.
¿Cuántas asociaciones, instituciones, juntas administrativas,
ministerios, directivas de grupos organizados y centros de poder importantes en
la toma de decisiones de nuestro país están en manos de testaferros y serviles
de la oligarquía? Incluyendo el ejército y la policía. ¿cuántos ciudadanos
hondureños organizados o no en el Partido LIBRE o en el FNRP han elaborado
estrategias para desafiar y tomar el poder y el control de decisiones de esos
centros de mando? En este sentido, envío mis más respetuosas felicitaciones al
Abogado Flores Lanza y a quienes con él han diseñado esta estrategia y se han
aventurado a hostigar al enemigo y a demostrar que así es como debemos luchar
para conquistar el poder.
La transformación estructural de un país tiene que comenzar
por la decisión ciudadana de asumir el compromiso individual y colectivo de
luchar por lograr incidir en el proceso de toma de decisiones, salirnos de
nuestro estado de contemplamiento, esperando que los demás hagan algo, o que
pase algo extraordinario que cambie todo, y que sean otros quienes asuman los
nuevos compromisos. Ojalá que cada uno de nosotros asumiera el papel de compromiso
revolucionario como lo ha hecho el Abogado Flores Lanza y decidiéramos lanzarnos
a la conquista de objetivos neurálgicos del régimen para desde sus entrañas
transformarlo o conducirlo a un proceso de cambio estructural.
Es tiempo de revolución, es hora de que asumamos con
responsabilidad nuestro papel de revolucionarios y demostremos con hechos cuál
es nuestro compromiso para contribuir a la desintegración del Régimen
oligárquico para poder luego refundar la nueva institucionalidad. Quitarle el poder y el control de una
institución al enemigo, es como liberar un territorio en términos militares.
El grupo de abogados que junto Enrique Flores Lanza ayer
estuvo a punto de tomar el poder de la Junta Directiva del Colegio de Abogados,
merece todo nuestro respeto, nuestras felicitaciones, nuestro agradecimiento
por sus esfuerzos y por su compromiso de asumir la honda de David, para
enfrentarse con todo su arrojo e hidalguía contra un Goliat que desde hoy no
dormirá tranquilo, mientras en Honduras exista conciencia revolucionaria y
mientras los revolucionarios hondureños sigamos el ejemplo insigne de Lempira, Morazán,
Cabañas y tantos otros ejemplos de hombres y mujeres que con su honestidad nos
alumbraron el camino para construir una patria más justa, solidaria,
revolucionaria y socialista.
BenHer
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