Esa lucha por defender la democracia lo llevó a que fuera detenido y privado de su libertad por más de dos años, situación que le cambió por completo su vida.
Hoy, está en libertad y de a poco va recobrando su vida, pero como dice “mi situación ya no es como la de antes, a uno que ha estado en esos lugares (preso) lo ven de otra manera y tengo que luchar contra eso también, pero ahí estoy trabajando para salir adelante”.
El 25 de diciembre de 2019 fue privado de su libertad, luego de ser detenido y que el Ministerio Público lo acusara de provocarle daños con un artefacto explosivo a un joven que trabajaba en la edificación de la Villa Navideña en Choluteca.
“Gracias a Dios estamos aquí afuera y luchando, pues queriendo salir de todo este problema, porque igual somos inocente de este caso. Esperamos con la fe en Dios salir pronto, pues porque no tenemos nada que ver”, explicó el joven.
Añadió que “injustamente estuve encerrado, perdí todo, mi familia, mi hogar, porque yo no estoy con la mamá de mi hija y a mi hija solo la puedo ver una vez a la semana o los sábados”.
Contó que antes que le sucediera esto su hija era muy cariñosa con él, cada vez que llegaba a la casa lo abrazaba, lo mimaba, le quitaba los zapatos, y ahora todo es distinto, ya no está con él y tiene restricciones para poderla ver y estar con ella.
“Me siento mal porque ella estaba acostumbrada a otra vida. Nunca imaginé vivir una vida así, pues yo siempre con mi familia, con ella, yo nunca me despegué, y lo que más me duele en este caso, tengo el amor de mi hija, pero no como yo lo quisiera”, lamentó.
Agregó que “en esos dos años dos meses que estuve allá me perdió bastante el amor, porque cuando yo caí todavía estaba pequeña, no sabía nada, ahora está más grandecita, entiende un poco más las cosas”.
“A mí me cambió la vida definitivamente, porque ahí es otro mundo definitivamente, porque cuando usted entra a ese lugar empieza a ver aquel montón de personas como hormigas, caminando de un lado para otro y usted dice en dónde estoy, y en ese momento usted no haya ni para donde agarrar, porque no tiene ni comunicación con nadie, ni no conoce a nadie, así me sentí yo desconectado de este mundo”, manifestó Castillo.
“Ando libre y estoy en otro ambiente, puedo trabajar, puedo ayudarle a mi mamá, puedo ayudarle a mi hija, pero a la misma vez siempre uno se siente como que está preso siempre, porque hay amigos que vienen y me dicen vamos a tal lado, vamos a bañar a tal lado, pero yo no puedo, aunque quiera”.
Gracias a Dios me siento bien por el momento, pero me sentiría mejor más bien que ya saliera todo este rollo, es mi mayor deseo salir de todo este problema, la verdad, para estar más tranquilo.
Joseph exige que se haga justicia, “más que todo que me den mi libertad definitiva de ese caso, porque la verdad que si me perjudicó bastante a mí eso, porque igual me mancharon mi expediente; y solo pido que haya justicia y que me den mi libertad definitiva para poder rehacer mi vida.
Una vez a la semana Josehp acude a los juzgados a firmar, y trata de no fallar porque dice que si deja de ir una vez, esto le ocasiona más problemas.
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