La Prensa.hn/ 24 Dec 2015 / 05:48 Pm / Kansas, Estados Unidos
La iniciativa del futbolista Roger Espinoza al encabezar una brigada de Unbound en el departamento de Santa Bárbara, buscaba transmitirles a los jóvenes parte de sus muchos conocimientos en una cancha de futbol, además de motivar a las personas de escasos recursos a luchar por sus sueños y nunca rendirse, su reputación de jugador aguerrido e inquebrantable brindaba más credibilidad a cada una de sus palabras; sin embargo, los apadrinados por esta institución sin fines de lucro causaron el mayor impacto en el seleccionado nacional pasando en tan solo pocas horas de maestro a alumno.
“He sido bendecido con la oportunidad de venir a Honduras a colaborar con algunas de las familias más pobres del país, inicialmente uno viene con una idea diferente, pero cuando llegas te das cuenta de la realidad de las cosas, ves el sacrificio que realizan estas personas para sobrevivir, le ves la cara a la pobreza de frente y te entristece; al escucharles y ver su empeño por salir adelante de la mano de Unbound me llené de orgullo, satisfacción y esperanza”, Indicó la estrella de la MLS.
__Personalmente y durante su niñez en Puerto Cortés la
pobreza y la necesidad le hicieron compañía a la familia
Espinoza-Ramírez, ¿Imaginaba una situación tan precaria en esta corta
visita?
Nunca me imaginé tanta miseria en Honduras, siempre pensé que las personas por lo menos tenían todo lo necesario para vivir, este viaje me abrió los ojos y he visto que cada situación es diferente y que muchos de nuestros habitantes están sumergidos en una extrema pobreza, aun así me sentí muy orgulloso de escucharlos decir que con lo poquito que tienen van a luchar, que van a estar positivos y que colaborarán para algún día tener una Honduras mejor.
Unbound no ve en estas familias pobreza, esta organización global constituida en más de 20 países ve en cada niño, joven o anciano potencial y esa es la filosofía que les ha permitido cambiarle la vida a millones de personas alrededor del mundo. En Santa Bárbara su impacto social se ha hecho sentir con más de 5,000 familias beneficiadas en la actualidad
Nunca me imaginé tanta miseria en Honduras, siempre pensé que las personas por lo menos tenían todo lo necesario para vivir, este viaje me abrió los ojos y he visto que cada situación es diferente y que muchos de nuestros habitantes están sumergidos en una extrema pobreza, aun así me sentí muy orgulloso de escucharlos decir que con lo poquito que tienen van a luchar, que van a estar positivos y que colaborarán para algún día tener una Honduras mejor.
Unbound no ve en estas familias pobreza, esta organización global constituida en más de 20 países ve en cada niño, joven o anciano potencial y esa es la filosofía que les ha permitido cambiarle la vida a millones de personas alrededor del mundo. En Santa Bárbara su impacto social se ha hecho sentir con más de 5,000 familias beneficiadas en la actualidad
“Estas comunidades han sido olvidadas por el Gobierno, por eso el
papel de Unbound es aún más importante, ellos les han proveído con las
herramientas para que puedan subsistir, ven en cada miembro de esta gran
familia mucho potencial, prueba de ello son todos esos niños
apadrinados que están cursando la escuela primaria, cientos de ellos en
el colegio y en las diferentes universidades, la capacidad está allí,
solo hacía falta que alguien creyera en ellos”, Agregó Roger Espinoza.
__¿Qué fue lo que más lo marcó de esta visita a Honduras?
El darme cuenta de lo difícil que es la vida en ciertas zonas de Honduras, las personas que conocí tienen una vida muy complicada, uno a veces siente que tiene problemas y no es así, la vida es un desafío diario para ellos, caminan 1-2 horas para poder asistir a la escuela, viven en montañas muy retiradas y por el deseo de educarse realizan esos largos recorridos, lo que hacen es sencillamente increíble y digno de admiración.
Una de las frases más frecuentes durante la estadía del centrocampista de la Selección Nacional de Honduras en Santa Bárbara fue: “Gracias por no olvidarse de nosotros y visitarnos”, seguido por el reclamo: “Aquí nadie nos visita”, así fue recibido Roger, como una gran estrella y en sus humildes viviendas los pobladores lo recibían con arreglos florales, alimentos, mensajes escritos, fotografías suyas, grupos musicales, besos, abrazos, oraciones, obsequios y más abrazos, los cuales le acompañaron a cada paso que dio, él sonrió, comió, bailó, jugó fútbol, repartió cariño y se dejó querer por personas a las que llamó mi gente.
“Me llenó de mucha ilusión cada gesto, cada palabra, además de cada sonrisa, nunca en mi vida me imagine un recibimiento así, estas personas con su belleza y humildad se ganaron mi corazón, me ofrecieron sus casas y me sentí como si yo fuera parte de ellos, pensé que ellos podrían aprender mucho de mí y que podría motivarlos y fue todo lo contrario, les estoy muy agradecido por compartir esta valiosa lección de vida conmigo”, Agregó mientras sonreía.
Las visitas por las comunidades de Los Anises, El Escondido y Rio Caña en el municipio de Chinda, Santa Bárbara, permitieron al ex Wigan degustar de lo más variado de la cocina típica de la región: Chilate, papaya en miel, ticucos, montucas, tamalitos, así como artesanías envueltas en papel de regalo con estampados navideños lo recibían en cada una de las humildes moradas, las cuales abrieron sus puertas para recibir al abanderado de Unbound en esta visita a Honduras.
__¿Al terminar la visita, qué es lo que te llevas de esta gente?
Lo más valioso que me llevo es la forma en que estas personas ven la vida, tienen mucha educación y se respetan y apoyan como familia, me cambiaron la vida, inicialmente creí que yo llegaba a ayudarles a ellos y al final yo fui el más beneficiado, salí de allí con mucho aprendizaje, aprendí a valorar más la simpleza de la vida y a no darle tanta importancia a lo material, con lo poquito que ellos tenían eran felices y a la hora de trabajar no andan poniendo peros, les admiro su positivismo y entrega ante tanta adversidad.
__De las clínicas de fútbol que impartiste a un centenar de menores, ¿Qué te queda?
Me sorprendió el número de personas que asistieron, pero lo más impresionante fue saber que la mayoría de ellos vivían muy lejos del estadio, muchos se levantaron a las 4-5 de la mañana para poder llegar a entrenar después de haber caminado 1-2-3 horas desde comunidades adonde se carece de algún tipo de transporte. Los admiro, les agradezco el haber venido con deseos de aprender, con una gran disposición para el trabajo. Las personas de la tercera edad, esas que muchas veces olvidamos que existen representan parte importante de lo que puede ser el futuro de Honduras, ya que poseen muchos valores, los cuales les están siendo transmitidos a estos niños, les enseñan como poder sobrevivir y vivir la vida.
http://www.laprensa.hn/deportes/914210-410/nunca-me-imagin%C3%A9-ver-tanta-miseria-en-honduras
__¿Qué fue lo que más lo marcó de esta visita a Honduras?
El darme cuenta de lo difícil que es la vida en ciertas zonas de Honduras, las personas que conocí tienen una vida muy complicada, uno a veces siente que tiene problemas y no es así, la vida es un desafío diario para ellos, caminan 1-2 horas para poder asistir a la escuela, viven en montañas muy retiradas y por el deseo de educarse realizan esos largos recorridos, lo que hacen es sencillamente increíble y digno de admiración.
Una de las frases más frecuentes durante la estadía del centrocampista de la Selección Nacional de Honduras en Santa Bárbara fue: “Gracias por no olvidarse de nosotros y visitarnos”, seguido por el reclamo: “Aquí nadie nos visita”, así fue recibido Roger, como una gran estrella y en sus humildes viviendas los pobladores lo recibían con arreglos florales, alimentos, mensajes escritos, fotografías suyas, grupos musicales, besos, abrazos, oraciones, obsequios y más abrazos, los cuales le acompañaron a cada paso que dio, él sonrió, comió, bailó, jugó fútbol, repartió cariño y se dejó querer por personas a las que llamó mi gente.
“Me llenó de mucha ilusión cada gesto, cada palabra, además de cada sonrisa, nunca en mi vida me imagine un recibimiento así, estas personas con su belleza y humildad se ganaron mi corazón, me ofrecieron sus casas y me sentí como si yo fuera parte de ellos, pensé que ellos podrían aprender mucho de mí y que podría motivarlos y fue todo lo contrario, les estoy muy agradecido por compartir esta valiosa lección de vida conmigo”, Agregó mientras sonreía.
Las visitas por las comunidades de Los Anises, El Escondido y Rio Caña en el municipio de Chinda, Santa Bárbara, permitieron al ex Wigan degustar de lo más variado de la cocina típica de la región: Chilate, papaya en miel, ticucos, montucas, tamalitos, así como artesanías envueltas en papel de regalo con estampados navideños lo recibían en cada una de las humildes moradas, las cuales abrieron sus puertas para recibir al abanderado de Unbound en esta visita a Honduras.
33 partidos internacionales ha jugado el volante Roger Espinoza con la Selección Nacional de Honduras.
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__¿Al terminar la visita, qué es lo que te llevas de esta gente?
Lo más valioso que me llevo es la forma en que estas personas ven la vida, tienen mucha educación y se respetan y apoyan como familia, me cambiaron la vida, inicialmente creí que yo llegaba a ayudarles a ellos y al final yo fui el más beneficiado, salí de allí con mucho aprendizaje, aprendí a valorar más la simpleza de la vida y a no darle tanta importancia a lo material, con lo poquito que ellos tenían eran felices y a la hora de trabajar no andan poniendo peros, les admiro su positivismo y entrega ante tanta adversidad.
__De las clínicas de fútbol que impartiste a un centenar de menores, ¿Qué te queda?
Me sorprendió el número de personas que asistieron, pero lo más impresionante fue saber que la mayoría de ellos vivían muy lejos del estadio, muchos se levantaron a las 4-5 de la mañana para poder llegar a entrenar después de haber caminado 1-2-3 horas desde comunidades adonde se carece de algún tipo de transporte. Los admiro, les agradezco el haber venido con deseos de aprender, con una gran disposición para el trabajo. Las personas de la tercera edad, esas que muchas veces olvidamos que existen representan parte importante de lo que puede ser el futuro de Honduras, ya que poseen muchos valores, los cuales les están siendo transmitidos a estos niños, les enseñan como poder sobrevivir y vivir la vida.
http://www.laprensa.hn/deportes/914210-410/nunca-me-imagin%C3%A9-ver-tanta-miseria-en-honduras
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