domingo, 9 de junio de 2013

HONDURAS: TSC prácticamente se declara incapaz de auditar la secretaría de Salud // Roxana Araujo anuncia que no regresará a la titularidad de secretaría de Salud // Rectora de la UNAH da tres meses de plazo para que interventora termine con estatus quo en secretaría de Salud

Autor del articulo: Proceso Digital / 8.06.2013


Tegucigalpa – Las autoridades del Tribunal Superior de Cuentas (TSC) prácticamente se han declarado incapaces de practicar una auditoría para determinar el grado de corrupción que se ha denunciado existe en el manejo de medicamentos de la secretaría de Salud.


- El magistrado Miguel Mejía argumenta que se necesitan 70 auditores, muchos de ellos especializados en química y farmacia y la erogación de al menos 17 millones de lempiras.

- Hasta el momento, la auditoría interna de la secretaría de Salud, no ha remitido ningún informe al organismo contralor.
- La presidenta del Colegio Químico Farmacéutico, Narda Maradiaga, califica el problema con la calidad de los medicamentos como “bastante grave”.
- Empresario farmacéutico señala que se deben cerrar algunos laboratorios para que le dejen de dar puercadas a los pacientes.El magistrado del TSC, Miguel Mejía, reiteró que ese organismo tiene la obligación de practicar una auditoría en la secretaría de Salud, particularmente al Almacén Central de Medicamentos.

Hay que eliminar algunos laboratorios
Por su lado, el ex presidente de esa organización gremial y empresario del rubro de medicamentos, Alfredo Farah, dijo que esa situación data desde hace varios años, desde que ese colegio no contaba con un laboratorio de análisis con calidad y garantía de que lo que ahí se hace es lo correcto.

Indicó que desde que fue dirigente del colegio ha estado preocupado por el análisis de los medicamentos y cada vez que se cambiaba un ministro de la secretaría de Salud le ponían a la orden el laboratorio y le decían que fuera a conocer las buenas cosas que se tienen en Honduras, ya que ese laboratorio es considerado el mejor de Centroamérica, el que fue remodelado y siempre ha andado el rumor que lo van a quitar a esa organización gremial, ya que el Estado no tiene la capacidad de montar un laboratorio similar.

Sobre la circulación en hospitales y centros de salud de medicamentos con poca calidad y sin reunir las especificaciones, es porque no se mandan a hacer los análisis al laboratorio bajo el argumento que son muy caros.

“Si ellos (laboratorios) le venden un millón de frascos al Estado y nosotros les cobramos 400 dólares por análisis, ¿a cómo le sale cada frasquito?”, se preguntó Farah, quien cuestionó que los lotes o muestras se toman al azar y ni siquiera los inspectores del laboratorio van a tomar las muestras.

Señaló que cuando estuvo al frente de la organización gremial, denunció a un laboratorio que recogía los productos que ya estaban vencidos en el gobierno y los volvía a meter en blíster con otra fecha de vencimiento.

“Yo creo que esos laboratorios ya los deberían eliminar de la compra de medicamentos porque no es posible que le sigan dando puercadas al pueblo, el gobierno es cierto que se atrasa en pagarles, pero les paga y entonces el gobierno, tiene la facultad de decirles: bueno a vos no te compró porque vos sos un puerco, vos no haces medicinas de calidad”, expresó el profesional de la química y farmacia.

Farah cuestionó que cuando se está al frente del laboratorio, se rinde una fianza de secretividad y solamente se puede informar sobre los análisis al Almacén Central y a nadie más, porque “ellos son los que nos mandan a nosotros que analicemos tal producto, pero no podemos divulgarlo, porque nos meten una demanda y se quedan con el laboratorio pues todo está amarrado para que la corrupción continúe”.


Auditoría interna no funciona
No obstante, indicó que la secretaría de Salud, cuenta con una unidad de auditoría interna que está obligada a llevar los procesos de control y también a verificar si las compras que se han realizado en esa dependencia, llenan los requisitos legales, la calidad y cantidad de los medicamentos de acuerdo a las solicitudes que hacen los 28 hospitales y los centros de salud del país.

Sin embargo, “no tenemos nosotros de parte de la auditoría interna del ministerio de Salud ningún informe al respecto”, arguyó Mejía.

Se requiere de una auditoría completa
El funcionario estimó que hacer una auditoría completa en el Almacén Central de Medicamentos, sería aproximadamente para cinco o seis años donde no se ha hecho ninguna revisión al respecto, eso significa que se han gastado más de 6,500 millones de lempiras en medicamentos.

“Esa auditoría no se puede hacer de la noche a la mañana, lógicamente requiere de tiempo efectuarla y también necesita recurso humano suficiente para poder hacer una auditoría a nivel nacional; eso significa que el TSC debe disponer de recursos económicos para pagar las auditoría”, arguyó.

Recordó que el TSC, de acuerdo a la ley, trabaja en base a documentaciones y no de especulaciones y por eso necesita ir a verificar todos los actos de administración que se han llevado a cabo referente a las compras de medicamentos y establecer si han llenado los requisitos legales.

Añadió, que además el TSC requiere de personal especializado como farmacéuticos y médicos a fin de que garanticen que las licitaciones han sido correctamente efectuadas.

No obstante, Mejía apuntó que los responsables de la corrupción en el manejo de los medicamentos son las personas encargadas del almacén de depósito de los fármacos, así como la parte administrativa de la secretaría de Salud, aunque el TSC no puede prejuzgar si ha habido o no corrupción y quiénes son los responsables de las irregularidades que se han cometido, hasta que no se haga una auditoría y se verifique quiénes son los funcionarios culpables de ese latrocinio en contra del pueblo hondureño.

Se requieren 70 auditores y 17 millones de lempiras

Aclaró que el TSC tiene que hacer una investigación en ese caso, independientemente que se haya nombrado una Comisión Interventora en la secretaría de Salud pues no hay ninguna otra institución que esté autorizada constitucionalmente para efectuar auditorías a las dependencias del Estado.

Mejía alabó el trabajo que está desempeñando la organización no gubernamental Transformemos Honduras al investigar y denunciar la corrupción en el manejo de los medicamentos en la secretaría de Salud y ese organismo contralor, ha suscrito un convenio con esa institución para que los resultados de esa investigaciones, las haga llegar al TSC.

En ese sentido, una vez que el organismo ha elaborado un informe y se han encontrado irregularidades de tipo penal, el caso se pasa al Ministerio Público y hasta ahí llega la responsabilidad del TSC.

Señaló que el Ministerio Público ha intervenido el Almacén Central de Medicamentos y hará lo que corresponda.

Mejía apuntó que constitucionalmente el TSC tiene una independencia absoluta para poder operar y ninguna Comisión Interventora puede increparlo, aunque si le puede solicitar informes del porqué no se han hecho las auditorías y la respuesta es clara; “una auditoría de esa naturaleza, se necesitan más de 70 auditores para auditar un período de más de cinco años y una cantidad arriba de los 6,500 millones de lempiras y esa auditoría no la vamos a hacer con dos personas sino están calificadas para hacerlo y requiere de un presupuesto que el tribunal no dispone en este momento”.

No obstante, indicó que han solicitado el dinero para poder practicar esa auditoría que cuesta aproximadamente 17 de millones de.

Problema con calidad de medicamentos es “bastante grave”
Y es que las denuncias de corrupción en la secretaría de Salud son espeluznantes, a tal grado que se ha asegurado que no sólo hay problemas con la cantidad sino con la calidad, donde se ha certificado que algunos de los fármacos incluso han sido contaminados con heces fecales poniendo en riesgo la vida de miles de pacientes.

La presidenta del Colegio Químico Farmacéutico de Honduras, Narda Maradiaga de Nazar, indicó que esa organización a través del laboratorio de análisis de medicamentos, proporciona el informe técnico de los fármacos que son enviados por la secretaría de Salud y que entran a licitación para luego ser distribuidos en los hospitales nacionales.

Calificó el problema de la compra de medicamentos como “bastante grave”, el que se ha venido dando desde hace mucho tiempo y en anteriores administraciones ya se había detectado ese inconveniente, pero nadie había tomado la importancia de lo que eso significaba hasta este momento que lo hizo la ministra del ramo, Roxana Araujo, quien asumió el papel como realmente corresponde.

Indicó que los análisis que se hacen en el laboratorio de esa organización gremial son para determinar la calidad del medicamento en cuanto al principio activo, su concentración, su solubilidad y su estabilidad, pero no se certifica si poseen heces fecales o no.

Señaló que la secretaría de Salud es la encargada de hacer el muestreo de los medicamentos para posteriormente enviar lotes de fármacos para su análisis en ese laboratorio y la responsabilidad de esa organización es enviar los resultados del análisis técnico al Almacén Central para que ellos informen sobre los mismos.

Detalló que la mayoría de los medicamentos que se envían para análisis son producidos en el país, pero es el Estado el que les compra a las empresas farmacéuticas y el que establece las especificaciones para que un laboratorio de producción pueda entrar a una licitación.

No obstante, indicó que en muchos casos, el análisis del laboratorio ha arrojado que ciertos medicamentos no han llenado los requisitos y si le ha mandado el reporte al Almacén Central de la secretaría de Salud que debe tomar las acciones del caso.

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Roxana Araujo anuncia que no regresará a la titularidad de secretaría de Salud
Autor del articulo: Proceso Digital /8.06.2013


Tegucigalpa- La ministra de Salud, Roxana Araujo, anunció este sábado que la próxima semana presentará su renuncia irrevocable al cargo ante el presidente Porfirio Lobo.

El gobierno del presidente Lobo, determinó el viernes mediante un decreto ejecutivo, suspender del cargo a la ministra de Salud, al tiempo que nombró una comisión que asumirá la administración de esa cartera ministerial.
“En este momento se habla de una intervención, pero a mí me caracteriza la honorabilidad y en ese sentido, la próxima semana interpondré ante el presidente Porfirio Lobo mi renuncia irrevocable del cargo”, dijo en declaraciones a la radioemisora capitalina HRN.
Denunció que “los intereses son múltiples y desde el momento que hay compras amañadas, claro que hay grupos de poder atrás de mi separación del cargo y con ello no puedo competir”.
Señaló que la voluntad política debe de ser sobre cualquier poder económico que se quiera tener en cuenta en una institución como la secretaría de Salud.
Según la funcionaria, la corrupción se arraigó mucho en la secretaría de Salud.
“El problema para un secretario de Estado, son los mismos viceministros porque por lo general andan serruchándole el piso para ascender ellos a esos cargos, entonces en vez de tener colaboradores tienen personas que le quieran meter el puñal por la espalda y eso es imposible para cualquier ministro”, declaró.
Señaló que los objetivos que buscará la comisión interventora, “son los mismos con los que se me mandaron a mí y el primero que era transparentar los procesos de compra fueron con los que se iniciaron y los que han causado mi separación del cargo”.
Agregó que “cuando uno está al frente de la secretaría debe de arriesgarse a hacer un trabajo adecuado, aquellas personas que se han amparado en respaldos políticos y han buscado trabajo en la secretaría de Salud y que prácticamente han sido paracaidistas, creo que no tienen responsabilidad moral para poder criticar a otras personas”.
“Aquí no podríamos decir que hay alguna autoridad que sobrepase algunas dimensiones de las capacidades de los técnicos de la secretaría de Salud, los problemas sanitarios no se resuelven en 30 días, son procesos largos si se trabajan con interés”, argumentó
Araujo confió en que “espero que no vayan a levantar una cacería de brujas con las personas que me colaboraron, porque eso empañaría la función de la comisión interventora”.  

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Rectora de la UNAH da tres meses de plazo para que interventora termine con estatus quo en secretaría de Salud


Autor del articulo: Proceso Digital / 8.06.2013

Tegucigalpa- La rectora interina de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), Julieta Castellanos, espera que un término de tres meses la comisión interventora termine con el estatus quo de corrupción en la secretaria de Salud.
*Castellanos argumenta que la salida de Araujo era inminente debido a la presión de los grupos poderosos entronizados en el ministerio de Salud.
“Creo que la comisión que se ha nombrado Salud tiene un gran problema y es que si no hacen nada, van a confirmar que ellos han llegado ahí para que continúe el estado actual de compras, y si hacen lo que tienen que hacer, tendrían que continuar con las investigaciones y tendrían que cambiarle el rumbo a la secretaria”, explicó.
Agregó que “eso se va a ver en los próximos dos o tres meses, de ahí se podrá confirmar la prevalencia del estatus quo y si ha sido el triunfo de esos sectores que aparentemente se han enriquecido de una forma acelerada haciendo negocios a cambio de la salud o muerte de la población hondureña”, argumentó.
Sostuvo que proveedores, farmacéuticos, comisionistas, políticos, grupos económicos y auditores, se alinearon para que se diera la salida de la ministra Roxana Araujo de la secretaría de Salud.
Según Castellanos, los intereses económicos de los diferentes grupos que básicamente se convierten en proveedores, intermediarios o los que gestionan las ventas en el ministerio de Salud, fueron los que intervinieron para provocar la salida de Araujo
Recordó que en el caso de los proveedores, la ministra de Salud con su equipo dejó al descubierto algunas de las irregularidades que fueron exhibidas públicamente en un foro de televisión.
Otro de los problemas que llevaron a la salida de la ministra puede estar vinculado con la sustracción de medicamentos del Almacén Central, al revelar que en diferentes hospitales se solicitaba cierta cantidad de medicamentos que al final no llevaban a su destino, detalló.
Asimismo, está vinculada su salida con el cobro de comisiones donde muchos de los proveedores son víctimas de grupos internos de la institución que cobraban comisiones de 15 y 20 por ciento, coincidentemente la sobrevaloración de medicinas en un 20 por ciento tenía que ver con ese porcentaje que estaban cobrando esos grupos.
Igualmente, la ministra enfrentó a proveedores que llegaban con facturas millonarias para que se les pagarán supuestamente medicamentos que entraron en la administración del entonces ministro del ramo, Arturo Bendaña, al ser compras fraccionadas superaban los 30 millones de lempiras y ella no quiso acceder al pago ya que no había evidencia que entraron los fármacos.
“Estos grandes problemas fueron planteados al presidente Porfirio Lobo, por lo que valoramos que la salida de la ministra era inminente, era toda una campaña de los grupos interesados en confabulación con la auditoría interna”, puntualizó.

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