El periodista Jesús Vélez Menjívar, mientras esperaba en las afueras de Medicina Forense, se mostró impotente y angustiado.
Fuente: Tiempo.hn
SAN PEDRO SULA.-
El periodista Jesús Vélez Menjívar permaneció ayer afuera de Medicina
Forense, pero no para ejercer su trabajo sino para reclamar el cadáver
de su hijo Gary Jesús Menjívar Lara, de 19 años de edad, quien murió
luego de provocarse una riña, entre bandas, en el interior del centro
penal sampedrano.
El joven, a quien detuvieron el 2 de junio de 2010 por robo de
vehículos, obtendría su carta de libertad dentro de dos semanas porque
su defensa había desvirtuado los cargos. “Los que tenían las fichas
delictivas eran los amigos de mi hijo. Lo detuvieron porque andaba un
vehículo con reporte de robo. Mi hijo fue víctima de una engaño”,
manifestó Menjívar. En medio de su dolor y su impotencia, Menjívar, se
preguntó “cuántos más tienen que morir para que las autoridades se
preocupen por mejorar la seguridad en el centro penal, cuántas familias
tienen que desgarrarse como en este momento me encuentro”. “He perdido
parte de mi corazón, de mi vida”, detalló el padre de Gary mientras
lloraba desconsoladamente en las afueras de la morgue.
MÁS ARMADOS QUE LOS POLICIASEn los presidios se vive mucha inseguridad porque los presos hasta arsenales poseen y están más armados los que están presos que los que brindan seguridad en el interior del penal, dijo Menjívar. El comunicador lamentó que el gobierno no hace nada para frenar la ola de violencia. “Tienen que pagarse muchas vidas para ver si las autoridades se dignan a hacer algo”. “Todo el mundo dice que son bombas de tiempo lo que ocurre en estas cárceles, pero cuando parará la mecha de esto o cuando van las autoridades a parar esta bomba para que no vuelva a explotar”, manifestó el comunicador. Detalló que los reclusos que ingresan al centro penal deberían de ser reinsertados a la sociedad, pero en cambio salen en féretros. El periodista responsabilizó al gobierno porque “la seguridad corresponde a las autoridades y yo voy a proceder contra el Estado”.
Frase
“El dolor incrementa cuando uno sabe que tiene un familiar allí y no saben en que momento se lo llevará para darle cristiana sepultura”: Jesús Vélez Menjívar, padre de víctima
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Comienzan a entregar cadáveres de reos
Fuente:Tiempo.hn
SAN PEDRO SULA.-
Luego de interminables horas de espera y de varias revueltas que
hicieron los familiares de los reos en las afueras de la morgue, los
primeros dos cadáveres fueron entregados alrededor de las seis de la
tarde.
Uno de los cuerpos fue el del joven Gary Jesús Menjívar Lara, pues sus
familiares habían entregado la documentación que lo identificaba desde
la tarde del jueves que ocurrió la tragedia en el penal y luego de la
larga espera pudieron llevárselo. A las 4:00 de la tarde cuando los
familiares se cansaron de esperar bloquearon los dos portones de salida
de la morgue de Medicina Forense y no dejaron salir a ninguno de los
empleados ni ingresar al lugar a nadie como protesta porque les
indicaban que tenían que realizar otros procesos de identificación.
“Como es posible que ahora nos digan que tenemos que comprar ataúdes de
metal si ellos no murieron quemados, ni están desfigurados de sus caras,
a ellos los vimos en fotos y sabemos que son nuestros parientes”,
gritaba una de las mujeres que se apostaron en uno de los portones. La
directora de Medicina Forense, Celeste Rodríguez, les anunció que aún no
podían entregar los cuerpo y que requerían de cajas de metal lo cual
causo malestar porque los familiares permanecieron en las afueras de la
morgue desde el jueves y amanecieron esperando. Las autoridades de
Medicina Forense les aseguraron a los familiares que para hoy sábado ya
habrían terminado con las entregas de los cuerpos de los 13 privados de
libertad..-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-
Fuente:Tiempo.hn
“Mañanearon” a llevar comida a sus familiares
Decenas de mujeres y hombres llegaron ayer al centro penal para llevarles comida a sus familiares internos.
SAN PEDRO SULA.-
Doña Rosa Reyes, de 73 años, llegó desde la 7:00 de la mañana al centro
penal para asegurarse de que su hijo, Carlos Osmín Reyes, de 40, se
encuentra bien y para entregarle un plato de comida debido a que la
cocina ayer no estaba funcionando por el incendio que se originó en esa
área del presidio.
Las personas en su mayoría llevaban refrescos, churros y pollo con arroz y tortilla.
También Margarita Martínez, de 35 años de edad, llegó al centro penal
para llevarle un plato de comida a su hermano Oscar Martínez, quien se
encuentra recluido hace tres años por el delito de homicidio. Así como
doña Rosa y Margarita, decenas de mujeres y hombres llegaron al centro
penal para dejarles alimentos a sus familiares internos, los cuales
fueron entregados por medio de un grupo de reos, ya que nadie podía
ingresar a las celdas. Los custodios abrían y cerraban el portón de
ingreso para que los parientes de los presos pudieran ingresar uno por
uno al interior, donde eran recibidos por reos voluntarios, quienes eran
los encargados de transportan los alimentos y las encomiendas a sus
compañeros de celda.
REVISIONMartha Alicia Ordoñez, de 38 años, quien tiene a su esposo en el centro penal, señaló que está preocupada porque ahora las revisiones durante los días de visitas, que son los miércoles, sábado y domingo, serán más estrictas con esta masacre. “Si normalmente nos revisan hasta los calzones, se imagina ahora que no nos revisarán”, dijo Ordoñez mientras esperaba su turno para entregarle la comida a uno de los reos voluntarios. El ama de casa señaló que todos los días de visita le llevan comida a su esposo y siempre tiene que pasar por varios cubículos donde les revisan las comidas y el cuerpo para evitar que ingresen celulares o armas blancas y de fuego.
FRASE
“Hay una mujer que nos manosea toda para ver si llevamos algún objeto prohibido o si metemos droga y eso es bastante incómodo y uno soporta todo eso por querer ver a su familiar”
Martha Alicia Ordoñez, esposa de un reo
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