El también periodista y defensor de los derechos humanos, habló sobre el decreto de Amnistía y de la militarización a que ha estado sometida la sociedad hondureña en los últimos años.
Entonces repiten las mismas estupideces de los medios enemigos de los derechos humanos, señalando que esos son los mismos que defienden a los delincuentes. O dicen que la delincuencia no se puede combatir, porque ahí están los derechos humanos defendiéndolos.
“Como si la brutalidad sea efectiva para combatir la delincuencia. En ningún lugar del mundo se ha visto que con brutalidad, con asesinatos, con torturas; se combata la criminalidad”, acotó el diputado.
Pero aquí en Honduras es mucho más terrible. ¡Si la policía utiliza las patrullas para trasladar la droga!, ¡Las Fuerzas Armadas utilizan los helicópteros para trasladar la droga!, entonces de dónde le van a venir a decir a uno, que están combatiendo la criminalidad.
Fuentes dijo que incluso hubo un jefe de las Fuerzas Armadas que formó parte de una banda de roba-carros y que otros se han dedicado a vender armas, municiones, licores, drogas, etc.
“Entonces de dónde sale que éstos que son violadores de derechos
humanos, van a estar avalando una amnistía, los delincuentes son ellos.
Los que mantienen al crimen organizado activo y en el poder son ellos”,
señaló.
“Y toman uno que otro caso, y se quedan ahí con mentiras, con calumnias, diciendo que sólo son delitos políticos. El problema es que no entienden. Los muchachos que estaban luchando en la Universidad fueron acusados de usurpación, y ese es un delito común, no es un delito político. Al compañero que lo mandaron allá a la Tolva, lo acusaron de incendio agravado o de atentado por haber quebrado, supuestamente, unos vidrios”.
Pero no lo metieron a la cárcel por un vidrio quebrado, es mentira. Lo metieron a la cárcel por la persecución que tienen en contra de él, dado que es un luchador en defensa de los derechos ciudadanos, explicó.
Fuentes dijo que los delitos por lo que se metió a la cárcel a aquellas personas que participaron en manifestaciones en contra del golpe de estado o contra los fraudes electorales ejecutados por el partido Nacional, fueron delitos comunes.
“Y lo hacen de esa manera premeditadamente, para que no digan de que en Honduras hay persecución política”, explicó el diputado y periodista.
Los medios de comunicación no salen del tema del carretillazo y dicen que se robaron 40 millones. ¡Ay Dios mío!, le voy a decir algo, un solo diputado del partido Nacional, Renán Inestroza saqueó de los fondos del estado 113 millones de lempiras y nadie lo está persiguiendo a él. Ahorita si le van a pedir cuentas.
“Esa muletilla que han agarrado de que los derechos humanos defienden
delincuentes. De que la amnistía es para proteger los delincuentes
apegados al gobierno. Eso yo creo que no les va a pegar, porque ahora ya
hemos visto cómo ya va a regresar el compañero Urbina de Costa Rica,
que estando fuera del país lo acusaron de incendiar un camión”.
Al tiempo que aseguró que el resto del pueblo hondureño aplaude la aplicación de la amnistía aprobada en febrero de este año por el Congreso Nacional.
En relación a la militarización de la sociedad con presencia de efectivos militares dedicados a las tareas de orden público, Fuentes expuso que “no es cosa fácil terminar con la militarización porque es un proceso que tiene casi 60 años”.
El entrevistado dijo que desde 1963 cuando se produjo un golpe de estado de las Fuerzas Armadas contra el gobierno constitucional de Ramón Villeda Morales, “se mantuvieron en el poder 17 años directamente. Y de ahí heredamos unas costumbres que se han hecho ley”.
Por ejemplo al Instituto de Migración, los militares lo consideran de seguridad nacional y por lo tanto ellos son los que manejan eso ahí, ni siquiera la policía.
El congresista expuso otro ejemplo como que los 15 de septiembre, fecha en que se conmemora la independencia, los estudiantes de escuelas y colegios son adiestrados por efectivos militares para enseñarles a marchar.
¿Qué tiene que ver la independencia con los militares, si ésta no la logró ningún jefe militar?, se preguntó.
Al tiempo que señaló que la lucha que emprendió el General Francisco Morazán por la unificación de Centroamérica, tampoco se dio en la línea de los militares que hoy tenemos. “Estos son más bien anti-morazanistas”.
¿O por qué cree usted que en los colegios obligan a los alumnos a asistir con el pelo corto?. Porque es una costumbre militar, dijo.
El diputado indicó que pasaron cosas durante este tiempo tan terribles, como poner un militar con fusil en mano “viendo a ver si las medicinas que le daban en el hospital a los pacientes, eran las mismas que estaban en la receta”.
En los años 70´s, los militares dirigían el país directamente. No se elegían alcaldes, sino que los militares los designaban de dedo. Los gobernadores eran elegidos de dedo y no existía un Congreso Nacional. Ellos gobernaban a su gusto y antojo, detalló.
“Los militares tienen un poder exagerado y un presupuesto que es un privilegio. Ese presupuesto que es de los más altos, jamás ha sido auditado, Nunca ha sido revisado en qué gastan esos miles de millones de lempiras. ¿Se habrá preguntado la nación cuántos coroneles hay en Honduras, cuántos generales, cuántos tenientes coroneles”.
Por otro lado, Fuentes dijo que los militares son los que han dirigido aún en los gobiernos civiles y puso como ejemplo al gobierno liberal de Roberto Suazo Córdova que surgió al término de los regímenes militares.
Sin embargo, quien mandaba en ese gobierno civil era el general Gustavo Adolfo Alvarez Martínez. “El mismo que estuvo insistiendo en hacer la guerra contra Nicaragua, y en el período donde se organizaron los escuadrones de la muerte, que precisamente de ahí viene la génesis del COFADEH con los detenidos desaparecidos”.
El diputado recordó que siendo un muchacho asistía a los plantones del COFADEH realizados en la Plaza La Merced, en las denuncias de las primeras desapariciones forzadas que se produjeron por aquella época. Y que, a quienes se señalaba como responsables, era a los militares.
Fuentes también recordó que gracias a la incidencia del COFADEH se aprobó en el Congreso, el Día Nacional del Detenido Desaparecido, quedando como fecha de conmemoración el 30 de agosto de cada año.
“La violación de derechos humanos no fue algo que se le ocurrió a alguien. La violación de derechos humanos fue política de estado en los años 80´s. Al batallón 3-16, lo organizaron desde el estado, escogiendo a soldados de los diferentes batallones y juntando casi 300, que los entrenaron en Estados Unidos y luego vinieron a cumplir con su misión de vigilar, perseguir, secuestrar, torturar y asesinar a los mejores hijos e hijas que ha parido esta tierra hondureña”, sostuvo.
El periodista y defensor de los derechos humanos señaló que este dominio militar, por encima de la misma sociedad civil y por encima de los gobiernos civiles, ha sido de atraso para el país.
“No vamos a tener una verdadera democracia mientras exista esta elevada participación de los militares, en tareas que le corresponden a los civiles”, advirtió el diputado de LIBRE.
Consultado acerca de un reciente informe de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos en Honduras (OACNUDH), donde recomienda reducir las tareas de los militares en funciones de seguridad ciudadana, Fuentes expresó que es algo que es factible de realizar, pero que lo más difícil es sacar el militarismo de la cabeza.
“De la cabeza de nosotros como sociedad civil y de la cabeza de los militares. Para terminar con el militarismo tendríamos que cortar esa relación nefasta que existe, de supeditación de las Fuerzas Armadas con las Fuerzas Armadas estadounidenses”, recomendó.
Fuentes añadió que las Fuerzas Armadas de Honduras (FFAA) son como un apéndice de las Fuerzas Armadas estadounidenses. Todos los oficiales de Honduras los forman los gringos. Y los forman con una mentalidad de que ellos son superiores, que son los mejores, que son los más valientes y que por lo tanto los demás tienen que estar a su servicio.
El diputado dijo que dentro de la mentalidad militar, los civiles son menos (inferiores) y que deben estar bajo sus órdenes y rendirles pleitesía, porque ay de aquel civil que no acate la orden de un militar; sin saber que nosotros no le debemos ninguna obediencia a un militar, porque ellos no están por encima de nosotros.
“La relación nuestra debe ser con la Policía que tiene funciones de preservar la seguridad, de servicio a la sociedad. Pero esa idea de que los militares son más que los civiles, la tiene desde el recluta hasta el jefe de las Fuerzas Armadas y desgraciadamente muchísima gente, yo diría que la mayoría se intimida ante un grupo de militares; sobre todo cuando están armados”, sostuvo.
Fuentes llamó a desmilitarizar a la Policía Nacional, porque dijo que para contratar a alguien para que realice funciones policiales se le pide la “baja militar” (es decir que haya prestado el servicio militar). Y con esto se está cometiendo un grave error, porque esa persona ha sido formada como militar.
La propia Policía ofrece una formación militar a los oficiales, clases y efectivos, donde se dan humillaciones y malos tratos. “Hasta los mismos cadetes de la Academia de Policía se tratan como entre militares. Y esto más, algunos de los maestros son militares activos y otros retirados”, aseguró el congresista.
“El militarismo está metido en la Policía. Hay que sacar eso. La formación policial debe darla personas entrenadas en seguridad ciudadana, que sepan cómo preparar a alguien para servirle a la sociedad, para atender esas necesidades de protección, pero mientras estén los militares formando a los policías o se esté contratando a ex militares para que carguen el uniforme policial, va a ser la misma cosa”, advirtió.
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