viernes, 2 de octubre de 2020

Honduras: NO ES QUE ME VOY, ES QUE ME EXPULSAN

San Pedro Sula, 02 / 10 / 2020                                                                                                   
No es que quiera irme de mi país, me voy porque no me quieren, no me quieren porque soy pobre, porque soy joven, soy niño soy mujer y demandamos nuestros derechos me voy porque me expulsaron de la economía, violaron mi derecho a un empleo digno y un justo salario y con esa violación me robaron la oportunidad de la salud, la educación, la vivienda digna, me robaron el futuro. 

Me voy porque ser joven y pobre en mi país es sinónimo de delincuente, me estigmatizan por un tatuaje, por lo que canto y como me visto, por no tener empleo me dicen vago, y es que el que vaga es el empleo, pues siempre lo busco y nunca está, no soy vago ni delincuente, soy el resultado de las políticas de estado, que para las personas empobrecidas de este país nunca a estado. 

Me voy porque soy joven y mujer, desde la infancia acosada y a veces violada, me voy porque me siento un objeto que cualquier sujeto puede usar y abusar, me voy porque mi dignidad han destruido ocultando el crimen bajo el manto oscuro de la impunidad, me voy a buscar la oportunidad de ser yo, si la que nací mujer, si a esa que le robaron desde niña la dignidad . 

Me voy porque soy pobre, y soy niño y en mi país para muchos como yo el único espacio libre son las calles, nuestras camas las acera, nuestras cobijas las páginas de cualquier periódico, y nuestro colchón un trozo de cartón, de comida mejor ni les hablo siempre es como limosna, o la que se les cae a lo epulones de hoy y como alternativa los basureros de cualquier comedor, por eso me voy.

 Me voy porque soy mujer, soy hombre soy joven, soy niño, pero además porque soy pobre, me voy porque esos derechos que me han robado en las calles y otros espacios públicos los demando a los que desde el poder mandan, demandar así nuestros derechos, en terrorista nos convierte y somos sin darnos cuenta perseguidos y judicializados y encarcelados. 

Por eso nos vamos, pero nos vamos como una gran familia, no porque tengamos el mismo apellido, es porque padecemos los mismos males, es porque sentimos el mismo dolor la misma angustia, la miseria nos a juntado y juntos en caravana, caminamos hacia lo desconocido, con la fe, la ilusión y la esperanza de que lo encontrado en nada sea parecido a lo que hemos dejado .


NO NOS VAMOS, NOS EXPULSAN con mucho dolor

Manuel Suarez                                                       















                                     

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