Enero 7, 2018 / Por Galel Cárdenas
Parece que la memoria traiciona a algunos
líderes de la oposición política de las más diferentes configuraciones
que se han venido erigiendo en la medida que ha arreciado la dictadura
de JOH contra los militantes que se han manifestado a lo largo de 10
años en contra del Golpe de Estado que instauró un nuevo sistema
político denominado neoliberalismo fascista en Honduras.
Hubo un
primer momento, durante el proceso de consolidación del Golpe De
Estado, entre el 28 de junio y 27 de enero de 2010, cuando mediante
elecciones fraudulentas obtuvo la presidencia Porfirio Lobo Sosa y el
dictador Roberto Micheletti le entregó la banda presidencial. En este
ínterin se organizó el Frente Nacional de Resistencia Popular que
comandó protestas durante seis meses seguidos durante días enteros que
incluían los domingos.
Luego se produjo el Convenio internacional
de Cartagena que permitió la organización de un Partido Político
denominado LIBRE, finalmente inscrito en el Tribunal Supremo Electoral,
contra toda posible predicción de algunas fuerzas populares y dirigentes
que no asomaron su cabeza en tal oportunidad.
Se suscribió el
Convenio de Cartagena que tenía como título “Acuerdo para la
reconciliación y la consolidación del sistema democrático en la
República de Honduras”, mismo que se suscribió el 11 de mayo de 2011,
con las firmas de los signatarios Porfirio Lobo sosa, Presidente de
Honduras, José Manuel Zelaya Rosales Ex Presidente República de
Honduras y como testigos, los facilitadores: Juan Manuel Santos,
Presidente República de Colombia, Hugo Rafael Chávez Frías, Presidente
República Bolivariana de Venezuela, el cual la oligarquía dictatorial
y sus voceros mediático- políticos han deseado desconocer a toda costa.
Así que el tal convenio suscrito en el año 2011 sigue vigente
en los acuerdos siguientes enmarcar todas las acciones gubernativas en
la Constitución de la República: Garantía del regreso de Manuel Zelaya
Rosales en condiciones de entera seguridad; regreso de los exiliados
políticos; anulación de los procesos penales contra Manuel Zelaya
Rosales; velar por los derechos humanos; garantizar la inscripción del
FNRP (que en la práctica se le dio la potestad al partido LIBRE) de
integrar los organismos oficiales de carácter político en igualdad de
condiciones; posibilitar la consulta por medio del plebiscito para la
instalación de la Asamblea Nacional Constituyente; creación de la
Secretaría de Justicia y Derechos Humanos.
Esta hoja de ruta fue
posible ser aceptada por el gobierno nacionalista a raíz de las grandes
movilizaciones que se realizaron durante todo el tiempo de negociaciones
internacionales. Muchos puntos han sido cumplidos a cabalidad, otros a
medias y otros no se han ejecutado porque la dictadura lo impide.
La ruta es clara, se debería convocar a una Asamblea Nacional
Constituyente por medio de la instalación del plebiscito habiendo
primero integrado los organismos electorales por parte del Partido
LIBRE.
Hoy una plataforma de oposición en el que no está
integrado LIBRE, la cual propone una vía de Golpe de Estado parecido al
que destituyó al Presidente Manuel Zelaya Rosales, el nombramiento por
este golpe legislativo de un gabinete de transición y un llamado a
elecciones generales en seis meses.
Por eso es importante la
aclaración que la Coordinación General del partido LIBRE realiza y que
Gilberto Ríos Grillo difunde: “LIBRE está firme en la salida de la
dictadura de JOH, y en este propósito otros han vacilado. Así mismo es
urgente (lo exigimos) que LIBRE integre los organismos electorales TSE,
RNP y el de Justicia Electoral (que estamos demandando en Congreso
Nacional que apruebe) y no tenemos ninguna duda de reclamar este
derecho, desde que firmamos el acuerdo de Cartagena en Colombia y además
que sean políticos los que integren y dirijan las elecciones, no la
sociedad civil (apolítica) especialmente aquella que sirve de comparsa
al régimen…”
Tal propuesta de algún modo se antepone a la lucha
organizada del pueblo en los comandos insurreccionales que LIBRE
promueve hacia un paro nacional el 27 de enero.
La plataforma
desconoce así otros elementos de la historia política reciente, LIBRE
ganó las elecciones del año 2013 y 2017 y sólo un gigantesco y
vergonzoso fraude electoral avalado y supervisado por la Embajada
Norteamericana en Honduras, pudo arrebatar la victoria electoral de
Xiomara Castro y Salvador Nasralla, en estas últimas elecciones el
pueblo se lanzó a las calles a protestar masivamente a las calles y las
fuerzas armadas bajo la orden del dictador JOH asesinó no menos de 40
personas, apresó otra gran cantidad de líderes populares barriales,
mientras después el último candidato presidencial de LIBRE traicionó la
sangre derramada de los mártires y se entregó a un diálogo político
nacional avalado por los gobiernos de derecha a nivel internacional y
sus organismos colectivos de decisiones supra continentales.
La
sangre derramada desde el golpe de estado es mucha y se cuenta por
cientos, mismos que siguen asesinando líderes comunales como el
administrador del Movimiento Campesino Unificado del Aguán (MUCA), cuyo
nombre es Noel Delcid.
Desconocer la beligerancia y sacrificio
del Partido LIBRE es injusto y es inmoral. Y proponer mecanismos
parecidos o iguales para defenestrar a JOH es avalar el golpe de estado
del año 2009.
La ruta está trazada por el acuerdo de Cartagena
(2011), en donde se aprueba el llamado a un plebiscito para convocar a
una Asamblea Nacional Constituyente originaria que refunde el estado y
no lo remiende como proponen algunos sectores opositores a LIBRE y sus
acciones políticas.
El otro camino es la renuncia de JOH que LIBRE también plantea.
Fuente: Facebook Galel Cárdenas
lunes, 7 de enero de 2019
Honduras: LIBRE Y LA INSURRECCIÓN NACIONAL
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