lunes, 8 de octubre de 2018

Honduras: Damnificados en sur de Honduras siguen sin poder retornar a sus casas // Fantasma del "Mitch" hizo llorar a hondureños en Feriado Morazánico


En un 90 por ciento fue afectado el municipio de Marcovia, Choluteca, sur de Honduras. A este día las autoridades aún trabajan en plan para albergar a varias familias que decidieron no salir de sus hogares y que subestimaron las alertas de inundaciones, cientos de ciudadanos se mantienen en centros de acopio.
Por su parte, el sector productivo de ese municipio, denoto preocupación por las inundaciones en campos de caña de azúcar y el refugio que se dan los peces yendo mar adentro. Dania Martínez / El Libertador / Publicado: 08 Octubre 2018

                          Choluteca. Las últimas lluvias intensas han dejado afectadas a un 90 por ciento de las familias del municipio de Marcovia, departamento de Choluteca, sur de Honduras.

En declaraciones, el alcalde de ese municipio, Nahúm Cálix ha manifestado que “tenemos familias con sus viviendas totalmente inundadas y comunidades incomunicadas”, pero aseguró que ya se está coordinando con la Comisión Permanente de Contingencias (Copeco), para trabajar y tomar las medidas correspondientes.

“Hay que seguir trabajando con la población, ya que no tomaron los avisos de prevención como se debía, muchas personas no pensaron que las inundaciones iban a ser de esta magnitud”, expresó el edil.



Por otro lado, el presidente de la Asociación de pescadores del Golfo de Fonseca, Moisés Osorto, advirtió que “estamos un poco preocupados por esta situación ya que toda esta cantidad de agua dulce del golfo desemboca en el mar, trayendo consecuencias negativas”.

El directivo del gremio pesquero, explicó que no hay compatibilidad entre el agua salada y el agua dulce y “cuando el agua dulce entra, los peces se van a aguas profundas, bajando la cantidad de pesca en la zona, provocando un impacto en la economía de los pobladores”.

Otros sectores afectados por las lluvias, han sido la industria camaronera y los campos de caña de azúcar, ya que varias hectáreas quedaron inundadas.

En Marcovia, son cientos de personas que a esta hora siguen sin poder regresar a sus casas, ya que estas se mantienen inundadas, patrón que se refleja en otros municipios del sureño departamento.    

Según el Teniente Coronel Murillo, se trasladaron un promedio de 200 personas de los diferentes Barrios de la aldea de Monjarás, estos fueron llevados a los diferentes albergues y ante la abundante cantidad de damnificados, se optó por habilitar el nuevo mercado municipal como centro de acopio.

A pesar de disponer de albergues, existen muchas personas que se refugiaron en casa de amistades o conocidos lo que ha provocado que no cuenten con las ayudas correspondientes ya que las ayudas van directamente a los albergues.
                                
“A veces hay demasiada gente acumulada en los albergues por eso nos venimos a casa de un amigo, ahí estamos treinta albergados, le pedimos al alcalde que nos ayude porque también necesitamos de su apoyo, ni los frijoles cocidos pudimos sacar, hemos perdido todo”, manifestó Alonso Mejía, residente del Barrio Porvenir de Monjarás.

Cabe destacar que Choluteca, al igual que Valle y Francisco Morazán, mantienen la Alerta Roja, debido a que fueron los tres departamentos más afectados.  

http://www.web.ellibertador.hn/index.php/noticias/nacionales/3004-damnificados-en-sur-de-honduras-siguen-sin-poder-retornar-a-sus-casas 

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FANTASMA DEL “MITCH” HIZO LLORAR A HONDUREÑOS EN FERIADO MORAZÁNICO 

                          

Los dos sistemas de baja presión que azotaron a Honduras durante la “Semana Morazánica”, causando inundaciones, derrumbes, damnificados y muertes, espantó a la población que desde hace 20 años con el golpe del huracán “Mitch”, no ha logrado tener un efectivo sistema de emergencias climáticas.                       Redacción Central / EL LIBERTADOR / Publicado: 08 Octubre 2018          

Tegucigalpa. El fantasma del Huracán Mitch, apareció en Honduras durante la “Semana Morazánica”, ya que dos sistemas de baja presión azotaron al país por el Caribe y el Pacifico, trayendo consigo derrumbes, inundaciones en las urbes, muertes y miles de daminificados.

 Desde el pasado lunes, el territorio hondureño fue bañado por precipitaciones, y en el marco de la “Semana Morazánica” que es usada como un periodo vacacional de invierno, las lluvias fueron más frecuentes e intensas.

Lo anterior se debió a estos dos sistemas de baja presión, fenómenos, que no fueron detectados a tiempo por la Comisión Permanente de Contingencias (Copeco), las condiciones climáticas, “sabotearon” el plan turístico del Gobierno.

Se estimaba que unos dos millones de ciudadanos se movilizaran a distintos, por esa razón el Comité de Emergencias, movilizó a su personal para salvaguardar los puntos turísticos; sin embargo, desde el pasado jueves, el plan tuvo que cambiar, ya que ambos sistemas de baja presión, provocaron una crisis similar a la que hace 20 años provocó el Huracán Mitch.

Las primeras alertas se emitieron el miércoles 3 de octubre, cuando se tenía previsto la continuidad de las lluvias, pero, 24 horas después, la mayoría de departamentos entraron en estado de alerta. Entre estos destacaron Francisco Morazán, Valle y Choluteca, donde las emergencias fueron de gravedad, de hecho, para el viernes se decretó Alerta Amarilla.

Debido a los constantes derrumbes, inundaciones y la continuidad de lluvias, el país enteró entró en Alerta Verde, excluyendo los tres departamentos mencionados, ya que estos fueron declarados en Alerta Roja, que hoy se ha extendido por 24 horas.
                                               
 Según datos de Copeco, a la fecha se han atendido a más de 7,200 personas en 20 municipios de seis diferentes departamentos; asimismo se han habilitado más de 50 albergues, algunos ya fueron cerrados, según el titular de Copeco, Lisandro Rosales, porque las familias ya pudieron retornar a sus casas de habitación.

El informe de la estatal, señala que se ha donado más de 62 mil libras de comida. En cuanto a los evacuados, por acción de organismos de Emergencias, se registran 3,259; y, personas que buscaron ayuda por cuenta propia, unas 4,600.

Con los datos anteriores, replicados por el gobernante Juan Hernández, se entiende que más de 7,800 hondureños tuvieron que ser albergados durante el feriado Morazánico.

Por otro lado, se reportó que al menos seis personas perdieron la vida a causa de las lluvias. La primera víctima fue Vladimir Oquelí, que según testigos entró a rescatar unos papeles a la casa de una vecina, pero la edificación cedió y el joven cayó en la quebrada “El Sapo” de Comayagüela, que siempre significa un peligro en temporada lluviosa.

El hecho ocurrió el jueves y 24 horas después, “envuelto en la locura”, Juan Pablo Rodas, se lanzó al río Choluteca desde uno de los tres puentes que conectan a Tegucigalpa con Comayagüela. De acuerdo a los informes, Rodas ya había sido rescatado una vez por el cuerpo de Bomberos, pero minutos después volvió a lanzarse, según testigos el varón estaba bajo los efectos del alcohol, su cuerpo fue encontrado días después en Cantarranas.

En San Marcos de Colón, se reportó el deceso de Juan Bautista, quien en una acción temeraria cruzó una quebrada de alto caudal con su caballo, éste al no soportar el azote de la corriente deslizó y ambos fueron llevados y encontrados sin vida.
                         
Debido a los deslizamientos, en el municipio de Santa Ana, departamento de La Paz, una madre con sus dos hijos fueron soterrados, se trata de Sonia María Argueta (25), Dennis Argueta (9) y Ruth Argueta (7), a pesar de la incesante labor de rescate, no se logró salvarles la vida. Por otro lado, según el Hospital Escuela Universitario (HEU), durante el feriado se registraron seis muertes por accidentes de tránsito.

El portavoz del HEU, Miguel Osorio, afirmó que de 62 heridos registrados: “31 fueron producto de incidentes viales, 12 por armas de fuego y nueve por lesiones con arma blanca”. Agregó que la Sala de Emergencias, reportó 10 decesos, de los cuales seis fueron resultado de los accidentes.  

A pesar de esas desgracias, debido a la acción de los organismos de emergencia, se logró rescatar con vida al menor Wilfredo Ortiz (14), quien había caído en la quebrada “El Zancudo” de la colonia Villanueva en Tegucigalpa.

Cabe destacar que en varios puntos del país se reportó desborde de ríos, inundaciones y derrumbes, ante la emergencia por lluvias, incluso el sábado, varios aeropuertos cerraron operaciones, y hasta el momento varias comunidades se mantienen incomunicadas. Gran parte de la población cuestionó si el Gobierno subestimó las condiciones climáticas para “explotar” el feriado.

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