“En el 2013 el gobierno firmó al margen de la ley un contrato de exploración y explotación con la firma BG Group, ahora Shell”
Por: Redacción CRITERIO
Septiembre 20,2018 / redaccion@criterio.hn
Tegucigalpa.-En
el marco de un foro realizado este jueves en Tegucigalpa se reveló que
en Honduras hay petróleo pero que el gobierno está ocultando la
información porque el contrato de exploración y explotación sobre el Mar
Caribe, concedido a la firma inglesa BG Group ahora Shell, se firmó al
margen de la ley.
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El
foro fue organizado por el Instituto de Derecho Ambiental de Honduras
(IDAMHO) al que acudieron ambientalistas, defensores de derechos
humanos, abogados, expertos en hidrocarburos, entre otros, que
analizaron el contrato firmado entre el gobierno de Honduras y BG Group
en el año 2013, mediante una contratación directa obviando el proceso de
licitación.
Los
expositores señalaron que el contrato de concesión contiene cláusulas
que violan la Constitución, los convenios internacionales y las leyes
ambientales. Asimismo, atenta contra los derechos indígenas que habitan
la zona caribeña, estimada en 35 mil kilómetros cuadrados.
De
acuerdo a la evaluación, el contrato amenaza además los arrecifes
coralinos de Mesoamérica, las actividades pesqueras. También es lesivo
porque no se realizó una consulta libre, previa e informada que
establece Convenio 169 de la OIT y que ha generado conflictos sociales
en la zona de la Mosquitia.
El
contrato fue aprobado el 9 de abril del año 2013, mediante el Decreto
Ejecutivo PCM 017-2013, durante el gobierno de Porfirio Lobo Sosa
(2010-2014). Posteriormente, el 23 de mayo fue aprobado en el Congreso
Nacional.
Félix
Valentín, de la Organización Fraternal Negra Hondureña (Ofraneh),
lamentó que el gobierno haya firmado el contrato sin consultar con los
pueblos originarios que habitan la zona de la Mosquitia, entre los que
citó a la comunidad Misquita, Garífuna y a las etnias Pech y Tawahka.
Valentín
contó que las comunidades se dieron cuenta de la concesión hasta que
vieron al barco y la maquinaria que ya estaba trabajando en el lugar.
Asimismo, que el contrato establece que la concesión se iba a realizar
en un plazo que oscilaba entre cuatro a seis años, pero el proceso se
realizó antes porque los yacimientos de petróleo fueron encontrados en
el paralelo 84 y 85.
El
líder comunitario garífuna señaló que si la explotación no ha iniciado
es porque la transnacional así lo ha decidido ante la baja del precio
del petróleo a nivel internacional.
Valentín
bautizó a la concesión petrolera como un “proyecto de muerte”, porque
existe el riesgo de un derrame con lo que automáticamente las
comunidades de toda la zona atlántica, comprendida entre los costas de
Guatemala, Belice, los departamentos hondureños de Roatán, Cortés, Yoro,
Atlántida, Colón y Gracias a Dios, serán desplazadas y se registrará la
muerte de la flora y fauna.
El
dirigente de Ofraneh advirtió que al no existir un Estado de Derecho en
Honduras, seguirán luchando y reclamando sus derechos ante las
instancias internacionales como la Relatoría de los Derechos Humanos de
la Naciones Unidas, que ya se ha pronunciado en contra del contrato
suscrito con la BG Group.
CONTRATO LEONINO Y NEFASTO
Para
la expresidenta del Consejo Hondureño de la Empresa Privada (Cohep) y
experta en el tema de hidrocarburos, Juliette Handal, el contrato es
leonino y nefasto, porque fue firmado sin las más mínimas garantías de
beneficio para el Estado de Honduras.
“Siempre
se está hablando que en Honduras es típico los contratos leoninos, pero
este contrato realmente es nefasto. Yo no estoy en contra del
desarrollo, y que bueno si hay petróleo en el país, que se explote, pero
para beneficio de los hondureños y que no se deje al Estado de lado”,
expresó Handal al cuestionar que la mayoría de los beneficios favorecen
al contratista y no al Estado.
La
empresaria farmacéutica apuntó que quienes representaban al Estado, en
el momento en que se originó la firma del contrato, hicieron el trato a
la velocidad del rayo, ya que iniciaron los acercamientos con la firma
inglesa en el año 2012 y en mayo de 2013 ya habían estampado la rúbrica.
Las
negociaciones con BG Group estuvieron a cargo del entonces secretario
de Recursos Naturales y Ambiente, el exfiscal general adjunto, Rigoberto
Cuéllar y la firma fue estampada por la entonces Procuradora General de
la República, Ethel Deras y Oscar Armando Manzanares Díaz, en su
condición de representante legal de BG International Limited, Sucursal
Honduras.
“La
gente que lo aprobó en qué estaban pensando, todos los representantes
de la patria, la gente que hizo los análisis”, dijo Juliette Handal al
lamentar el contenido de una de las cláusulas del contrato que establece
que las comunidades del litoral atlántico estarán bajo riesgo de ser
desplazadas ante cualquier accidente que se origine por el derramamiento
de petróleo.
La
empresaria hizo un llamado al pueblo hondureño para que lea el
contrato, ya que seguramente causará indignación, “y al que no le cause
indignación que mejor no se llame hondureño”, satirizó.
Los
estudios sobre la existencia de petróleo en la costa caribeña de
Honduras comenzaron desde los años 50, luego continuaron en los años 70 y
posteriormente en los 90, cuando se determinó que sí había el preciado
“oro negro”, lo único que en aquel tiempo se determinó que las
cantidades y la calidad no eran suficientes para la comercialización,
según las tecnologías de extracción de aquel entonces, dijo a CRITERIO
el presidente de la Coalición Patriótica para la Solidaridad, Juan
Carlos Rodríguez.
CONTRATO
El
contrato con BG Group establece un periodo de cuatro años para la
exploración, prorrogables hasta por dos años más, es decir un total de
seis años y para el periodo de explotación el plazo se definió en 20
años, prorrogables por cinco años más, es decir un máximo de 25 años.
“ PAGOSEl contratista se comprometió con el Estado a pagar antes del comienzo de cada año, los siguientes cánones por concepto de impuestos:Durante el periodo de exploración: $ 50,000 por la totalidad del área del contrato.Durante el periodo de explotación (desarrollo y producción): $ 1 por cada hectárea donde se desarrollarán los trabajos.Un pago adelantado único y no reembolsable de $ 300,000, correspondiente a seis años, en la fecha en que entró en vigencia el contrato.El contratista se comprometió además a efectuar una inversión de $ 250.000 en proyectos sociales en la zona.Se fijó además que el contratista haría un pago de $ 300,000 por adelantado, una vez que el contrato cobrara vigencia.El documento refiere además que el Estado de Honduras tendrá derecho a apenas el 15 % del total de las ganancias”
Para
el presidente del Colegio de Economistas de Honduras (CEH) Julio
Raudales, el hecho de que el país tenga petróleo en su costa caribeña
podría ser negativo, porque podría generar conflictos sociales y
violencia como ha ocurrido en los países más pobres de África, donde
pese a que la naturaleza es muy rica, hay mucha pobreza en su población.
Raudales
no descarta que Honduras sea un foco de atención para las
transnacionales petroleras motivadas, de ahora en adelante, por venir a
explotar el Caribe.
https://criterio.hn/2018/09/20/en-honduras-hay-petroleo-pero-el-gobierno-mantiene-el-tema-en-secreto/
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