Activistas del Partido Nacional reinician acciones contra sacerdote en Lepaera,Lempira.
Por Dina Meza / Miércoles 2 de abril 2014
La Red de Defensores de Derechos Humanos de
Lempira denunció esta tarde que hoy 02 de abril de 2014 se reinició la presión
para sacar por la fuerza de la Parroquia de Lepaera, Lempira, al padre Esteban
Guzmán, acciones que han ido en incremento desde que llegara a la diócesis de
Copán el obispo Darwin Andino, quien tiene en su agenda el descabezamiento total
de los sacerdotes que han mantenido una posición a favor de los sectores pobres
de la zona Occidental del país y contra el golpe de Estado.
Hace unos meses
una bomba de alto poder fue lanzada contra los portones de la casa cural donde
se encontraba el Padre Esteban, la misma destruyó parte del portón, sin que
hasta el momento el Ministerio Público haya iniciado una investigación de oficio
sobre este grave hecho.
HOY VAN HASTA SACARLO
Más de 100 activistas del
Partido Nacional, acompañados del alcalde nacionalista Edgar Murillo se han
tomado la Casa Cural colocando mensajes contra el sacerdote Guzmán y a medida
que avanza la noche de este miércoles la situación se pone más peligrosa contra
la feligresía que apoya al padre Esteban quien les ha acompañado por varios años
en sus comunidades.
De acuerdo a la denuncia hay agitadores del Partido
Nacional que esán presionando para que se lleven a cabo acciones de violencia
contra los pobladores de Lepaera que han llegado a la parroquia a apoyar a su
lider religioso.
Entre las personas que fueron señaladas están German Péres,
Marcio Lara, Juan José Bautista y el alcalde Edgar Murillo. "Responsabilizamos a
esta gente de cualquier baño de sangre que pueda ocurrir en nuestro pueblo dijo
la fuente que pidió el anonimato por la gravedad en que se encuentra la
situación.
A pesar de tratarse de actos reñidos con la Ley y que la policía
Nacional y la Policía Militar se encuentran en el lugar, no han movido un dedo
para detener este proceso que podría desencadenarse en un baño de
sangre.
Carros sin placas se han apostado en los alrededores y se presume que
es para hacer perfiles de los y las feligreses que apoyan al padre
Esteban.
Desde el golpe de Estado la cúpula de la Iglesia Católica ha besado
la mano ensangrentada de la oligarquía que dio el zarpazo contra la poca
institucionalidad que se había construido por la sociedad civil hondureña.
El
propio cardenal Oscar Andrés Rodríguez ha jugado un papel funesto a favor del
golpe, él fue el primero en levantar su voz el 05 de julio de 2009 cuando el
presidente Manuel Zelaya Rosales anunciaba su regreso al país en un avión
acompañado de altas personalidades latinoamericanas, entre ellas presidentes de
América del Sur. El cardenal habló de anticipado de un baño de sangre si llegaba
Zelaya. Ese día las balas perforaron el cuerpo del joven Isy Obed Murillo, que
murió fulminado por ellas, las cuales fueron disparadas por el ejército.
Las
acciones de la cúpula eclesial no son primeras de ese tipo, en los 80 justificó
la implementación de la Doctrina de la Seguridad Nacional impuesta por Estados
Unidos en Honduras y que dejó más de 184 desapariciones forzadas, asesinatos
políticos, torturas y persecusión política, en suma besó el puñal del asesino,
tal como dice el dicho.
No solo la Iglesia Católica se ha prestado para
justificar el golpe de las consecuencias gravísimas contra los derechos humanos
en Honduras y la persecusión contra la disidencia política, también lo ha hecho
la iglesia evangélica a través de la Confraternidad Evangélica de
Honduras.
Los gritos de agitación que inducen a la violencia se escuchaban
cuando conversé con gente que se encuentra en el lugar y que manifestó temer por
su vida.
Un llamado urgente para que nos solidaricemos con los pobladores,
compañeros y compañeras, y defensores de derechos humanos de Lepaera, Lempira y
en especial con el Padre Esteban.
Abajo incluyo fotos de la gente que ha
llegado, pancartas con mensajes contra el padre Esteban y fotos del atentado
ocurrido hace unos meses.
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