Tegucigalpa.El 25 de enero, se celebra el Día de la Mujer hondureña en memoria de la primera conquista política de las mujeres en 1955, que fue el derecho al sufragio, durante el gobierno de Julio Lozano Díaz.
Esta parte de la historia, generalmente contada por hombres, nos relata que fue una lucha que rompió paradigmas, para lograr sus derechos políticos que permitió que las mujeres, más allá de estar en casa, fueran parte de la palestra pública y política.
En la actualidad la mujer continúa en
la búsqueda de conquistas de espacios que se les niega, aunque en apariencia se les dé las oportunidades para optar a cargos de tomas de decisión, siempre se pretende que su voluntad sea manipulada por grupos de poder.
Sin embargo hay mujeres, defensoras de derechos humanos, que desde espacios específicos, alzan la voz en favor de los y las más desprotegidas, pues no ven a la mujer como ser individual, sino como parte de la sociedad, la mujer, madre, esposa, hija, abuela, debe ser feliz con su forma de vida, sentirse satisfecha con lo que realiza, y valorarse a ella misma, pues desde cualquier escenario está llamada a amar la vida en Honduras y cualquier parte del mundo.
Aunque esta fecha, con la que se celebra a la mujer hondureña, al recordar una conquista de participación política, el 1955, no incrementó su participación en cargos políticos o de elección popular, que primero se logró en un 30 por ciento y ahora del 50 por ciento, pero la cifra siempre es inferior a lo establecido. Según algunos estudios, la falta de equidad se refleja en que el nivel académico alcanzado por las mujeres es muchísimas veces más alto que el de los hombres. Sin embargo, no siempre se traduce en una mejora de sus condiciones de trabajo o en mayores oportunidades en el mercado laboral.
Y qué decir, con respecto a que a varias décadas de la proclamación de los Derechos Humanos, la violencia contra la mujer siga afectando a muchas familias, y Honduras no se queda al margen, donde sólo en 2013 se superó la cifra de 630 femicidios, en la mayoría de casos, sin que exista respuesta a la demanda de investigación y castigo para los culpables, apenas 98 casos fueron pasados a la Corte Suprema de Justicia.
No tenemos nada que celebrar y mucho porque luchar
Suyapa Martínez, del Centro de Estudios de la Mujer, Honduras, CEM- H, comentó que las mujeres enfrentamos un reto, y es la defensa de nuestros derechos, en la acciones política no tenemos nada que celebrar y mucho porque luchar, porque el Estado de Honduras tiene una gran deuda pendiente con la mujer hondureña.
Suyapa Martínez del Centro de Estudios de la Mujer Honduras, CEM- HPor lo que Suyapa Martínez, recordó las palabras de las sufragistas de hace casi 60 años “no pedimos el voto cómo peldaño de falsas ambiciones, lo pedimos como ciudadanas de este país”.
Por lo que debemos dar la pelea, no por una cuota de participación, sino por la paridad en puestos de toma de decisiones, en patronatos, organizaciones y demás a las que tengamos acceso y que generen cambios, además crear mecanismos efectivos en favor de la defensa de la mujer. Y parte de los cambios, es ejecutar acciones que ayuden a combatir la violencia doméstica, pues en 2013 se reportó más de 21 mil casos, y ya no hay asombro social ante un caso de violencia o femicidio, lamentó la defensora del CEM-H.
Eva Sánchez, representante de la Organización de Mujeres Intibucanas, Las Hormigas, expresó que la situación que enfrentamos a nivel económico y social en nuestro país, se está sintiendo muy fuerte en nuestros hogares, pues aunque las mujeres campesinas cosechan sus alimentos, sigue afectando el hecho que no hay un mercado para colocar sus productos, por lo que la ganancia fuerte se la queda el mediador o coyote (agiotaje).
Las mujeres que subsisten con su trabajo artesanal, artesanías, siembra de ayote, maíz, frijol, donde no comemos “bananos enlatados” sino “mínimos” que arrancamos del racimo, al natural, no comemos queso, sino cuajada, debemos luchar día a día, Por nuestro propio desarrollo.
No estamos a expensas del gobierno, pues para ellos el tema de las mujeres no es importantes, nos han cambiado el maíz zapalote por el híbrido, el pipian por el zapayo, el pataste espinozo por el liso; debemos rescatar nuestra soberanía alimentaria, no la seguridad alimentaria, porque nuestra tierra indígena debe producir nuestros productos, y ese trabajo lo vamos a impulsar las mujeres, desde nuestros huertos, aseguró Eva.
Es así que, tenemos desafíos por delante y mucho porque luchar, empezamos por nuestra casa, por nosotras mismas, valorándonos y amándonos, y ocupando el lugar que debemos, luchando por la igualdad y respeto a nuestros derechos, concluyó la representante de Organización de Mujeres Intibucanas, Las Hormigas.
Todos los días es “día de la mujer”
Deberíamos de acostúmbranos a saber y a creer, a pensar y actuar que todos los días del año, son día de la mujer, debemos darnos oportunidad y encontrarnos a nosotras mismas, para saber cómo respaldamos a las demás mujeres y la lucha por la equidad, un tema que debemos aprender a desarrollarlo y poner en práctica, más en el momento actual que vive nuestra América Latina, es que no debemos perder el objetivo, la lucha no es contra de los diferentes sectores sociales, comprendidos entre hombres y mujeres, sino en contra de quienes nos oprimen, que se convierte en práctica y políticas de estado, declaró Bertha Oliva, coordinadora general del Comité de Familiares de Detenidos Desaparecidos en Honduras, COFADEH.
Bertha Oliva“Pero tampoco lo tomo como un reto, tampoco reto a quien no debo, sino a los impunes que cometieron delitos, que siguen cometiendo crímenes que lesionan a la humanidad entera”.
Ser mujer y defensora de DDHH no es fácil, yo que he estado sometida a serias campañas de difamación, hostilidad y amenaza, me sirve para reflexionar y preguntar ¿Qué es lo que he hecho mal, que esta perversidad humana se agarra para seguir destruyendo?
En ese sentido yo lo que debo convocar es a todas las mujeres, madre abuelas, a las que están por ser madres o por ser abuelas, las mujeres que somos generadoras de vida, de esperanza y alegría, que no nos lamentemos por ser mujer, al contrario sintámonos orgullosas, acompañemos al pueblo para lograr transformaciones que nos puedan beneficiar a todos y todas, porque si empezamos con el tema de la división, que hay que tener sentido de cuerpo como mujer, nosotras mismas nos estemos discriminando.
No sé qué puede pensar alguna gente que siente repudio o rechazo por lo que una mujer hace, me parece que ha llegado el momento de sentarnos a evaluar nuestro quehacer, hasta dónde hemos aportado, hasta dónde y cómo queremos llegar, esos son los desafíos que tengo como mujer, defensora de DDHH, hondureña y planetaria.
Le digo a las mujeres que nos encontremos, que celebremos que somos mujeres, que el calendario marca un día especial, pero entendamos que todos los días somos mujeres y no somos débiles, al contrario, y eso es suficiente para transformar esta sociedad.
Ante paquete fiscal, la mujer asumirá retos en la economía del hogar
Maritza Gallardo, de la organización de promoción del desarrollo y lucha contra la hambruna, Oxfam, y que apoya la ejecución de proyectos en Honduras, manifestó que el paquete fiscal tendrá una influencia directa en un 80% de las personas asalariadas y empleados no formales, por lo que las mujeres tendrán un papel importante en la sostenibilidad del hogar, habrá 100 mil nuevos pobres y se sentirá más en las familias de madre soleteras.
Las organizaciones defensoras de DDHH tendremos que elevar la voz desde los diferentes espacios, regiones y redes para demandar el cumplimiento de los derechos de la ciudadanía.
El llamado es a la organización, y argumentando con documentos y estudios desde diferentes instancias se están publicando, con relación a lo que planteamos como un país que está levantando una agenda de cómo salir de la pobreza y no incrementarla más con medidas como las que el gobierno que entrante, ya está implementado antes de tomar el poder, analizó Gallardo.
Dijo que hay experiencias de organizaciones y redes locales y regionales que realizan acciones esperanzadoras, por lo que desde el trabajo en equipo ayudará a salir adelante, esto se basa en la capacidad de debatir y proponer ideas, desde la realidad y necesidad de las mujeres.
Es así, que el papel de la mujer hondureña, en el desarrollo del país, es invaluable, desde las que ostentan cargos de toma de decisión a nivel público o privado, las ejecutivas, amas de casa, madres solteras, abuelas, mujeres jóvenes y niñas, poco a poco van marcando no sólo la historia, sino la línea futura de Honduras, que se escribe día a día, con cada una de sus vidas.
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