Dirección / EL LIBERTADOR /
dirección@ellibertador.hn
Tegucigalpa.
EL LIBERTADOR, “Primer Auditor Social de Honduras”, denuncia ante la
sociedad hondureña, a la representación diplomática en el país, al mundo
y, general, a quien interese, que en la noche del martes/miércoles 27
de julio de 2016, las instalaciones del periódico fueron asaltadas para
llevarse equipo de uso habitual para almacenar información en todo medio
escrito de comunicación masiva.
Lo
extraño del robo a EL LIBERTADOR está en que mientras forzaron las
gavetas de escritorios, armarios y otros sitios de documentos, que luego
dejaron esparcidos en el piso de todos los departamentos, de las
paredes no tomaron cuadros de pintura creados por artistas hondureños de
renombre que un delincuente común percibe puede sacarle algún provecho,
igual pasó con otros bienes visibles en todas las áreas de la oficina.
Un
experto en seguridad contratado por este rotativo para que hiciera una
evaluación del robo y la escena, concluyó que quienes ingresaron al
inmueble no son delincuentes comunes y, puntualmente, llegaron a
llevarse información almacenada y escrita de interés para quienes los
enviaron, y concluyó que ellos sabían a qué iban desde que entraron, por
eso no se dedicaron a valorar que valía mas o menos de los bienes que
vieron dentro de las instalaciones y para despistar y por el uso tomaron
el microondas y las valiosas lentes de cámaras fotográficas.
Al
marcharse, aparentemente de manera apresurada, los mal vivientes
dejaron algunas computadoras encendidas y, extrañamente, dejaron
conectado y encendido el sistema de proyección (Datashow) al lado de la
refrigeradora, que también se halló con la puerta abierta, quizá porque
aprovecharon la luz y de esa manera evitaron utilizar las luces
convencionales de la cocina para no llamar la atención desde afuera.
Este
daño a la integridad sicológica, física y económica de EL LIBERTADOR no
ocurre por primera vez; durante 13 años de existencia y
posicionamiento, hemos sufrido distintos atentados contra nuestros
compañeros, contra nuestras compañeras y nuestros bienes, incluso, desde
acciones de amenaza a la vida hasta judiciales ofreciendo cárcel al
Director Fundador; hemos puesto denuncias en el Ministerio Público por
hackeo a EL LIBERTADOR, pero jamás prosperaron.
Informamos
a nuestros amigos y amigas, a los lectores y lectoras, a todos nuestros
contactos y fuentes de noticias e investigaciones y, ante todo, a los
que roban a EL LIBERTADOR, que si bien nos cuenta mucho comprar nuestros
equipos, nada pueden llevarse de nuestra información, porque la
almacenamos en sitios seguros externos a la oficina y en servidores
fuera de Honduras, porque entendemos perfectamente el clima de seguridad
que hoy prima en nuestro territorio y los riesgos que impone nuestro
trabajo al servicio de la sociedad hondureña.
No gustamos del escándalo, tampoco asumir postura de víctimas, por eso, rara vez este rotativo informa de hechos que de cuando en cuando alteran y entorpecen nuestro trabajo diario a favor de la nación hondureña, pues sabemos que nuestra auditoria social no necesariamente alegra a sectores de poder en el país, es así, que conste, está alerta conlleva el deseo de prevenir hechos irreparables contra la integridad física y sicológica de quienes formamos y forjamos esta empresa y los contenidos de EL LIBERTADOR.
A continuación les presentamos imágenes de la escena del robo en la oficina del periódico EL LIBERTADOR.
NOTICIA EN CONSTRUCCION
http://www.web.ellibertador.hn/index.php/noticias/nacionales/1594-asalto-sospechoso-a-periodico-hondureno-el-libertador
No hay comentarios :
Publicar un comentario