Escrito por Redacción en Martes, 24/06/2014 - 17:23
Serie 1/3Tegucigalpa, Honduras (Conexihon).- El viernes 6 de junio de 2014, Lester Ismael Moncada Ordóñez, de 15 años, salió de su casa de habitación, ubicada en las afueras de la ciudad, vestido con un pantalón de tela color gris y cubayera blanca, el uniforme del emblemático Instituto Central Vicente Cáceres (ICVC). Así inicia la cuenta regresiva del adolescente que cursaba el primer año de Bachillerato en Contaduría y Finanzas. Esta fue la última vez que los familiares y vecinos vieron con vida al muchacho.
Un día después, fue encontrado sin
vida envuelto en una cobija estampada roja y lazos azules (sábado 7), en
una colonia cercana a su centro de estudio. Unas
horas antes de su desaparición. Ese mismo viernes en horas de la tarde
compañeros, maestros y personal administrativo también vieron al Lester
Ismael Moncada Ordóñez dentro de las instalaciones del ICVC, pero según
los relatos, Lester sabía que lo asesinarían.
¿Qué le pasó a Lester?
La respuesta de lo que sucedió antes
del asesinato se transcribe íntegramente de los relatos que las personas
que tuvieron contacto con el joven, el último día de su vida, nos
revelaron. Por razones de seguridad nos reservamos el nombre de las
fuentes.
Testimonio 1
Sus padres ignoraban la expulsión
“Los
padres de Lester ignoraban que a él (Lester), lo expulsaron a inicios
de esa semana porque se le encontró marihuana en la mochila y además se
comprobó que el joven distribuía droga dentro del colegio.
Lamentablemente las autoridades del Central no siguieron el debido
proceso administrativo en cuanto a la expulsión de un alumno, pero
efectivamente a Lester se le separó del colegio por una falta muy
grave”.
“Como le repito, no se hizo lo
correcto al expulsarlo sin avisarle a los padres de familia y no remitir
el caso a las autoridades correspondientes como lo es la Fiscalía del
menor, hasta donde yo sé, solamente se le quitó la droga y se le
suspendió, con la suspensión me refiero básicamente a sepáralo
definitivamente del colegio”.
“No me corresponde a mí responderle el
por qué se actuó de esa manera, del porqué no se notificó a los padres
de esta expulsión, esa respuesta le corresponde a las autoridades del
Central”.
Droga decomisada al estudiante quedó en manos de la Junta Interventora.
Testimonio 2
Si quiere saber quién tiene la droga, busque al Presidente de la Junta Interventora
“No podemos saber por qué el joven
estaba metido en ese problema de drogas, tampoco podemos condenarlo por
eso, así como él habrán muchos más, pero lo que recuerdo fue que ese
viernes, este joven ingresó al Central con el único propósito de
recuperar la droga que se le había decomisado. Yo sé que buscó a las
personas que le retuvieron la droga y les pidió que se la devolvieran”.
“Según me dijeron, Lester les dijo:
‘si no regreso esa droga me van a matar’, pero las suplicas del muchacho
no fueron escuchadas por quienes le decomisaron la droga y mire cómo
este joven decía la verdad, él sabía que no devolver la droga era su
sentencia de muerte”.
“Si quiere saber quién tiene la droga o
quién lo expulsó, busque al presidente de la Comisión Interventora, él
es una fuente de primera mano en el caso de Lester, yo lo único que le
puedo afirmar es que este muchacho sabía que iba a ser asesinado y buscó
ayuda ante las autoridades de su centro educativo y estos se
desentendieron del caso, pese a la gravedad del asunto”.
Testimonio 3
Lo habrían secuestrado junto a dos niños más
“La bulla es que junto a ese alumno
(Lester), también secuestraron a dos más, eso dicen los alumnos y esa
teoría no se ha confirmado pero tampoco se ha descartado, ya han pasado
dos semanas y pese a que existe este fuerte rumor de otros dos jóvenes
aún no se ha podido sacar un inventario de los estudiantes para la
tranquilidad de ellos mismos”.
“Ese día (viernes seis), me llamó la
atención la mirada de este joven, sus ojos denotaban angustia y miedo al
momento de pedir conversar con una persona en particular (maestro), al
conocer su caso pensé que se trataba del temor a la represión de sus
padres o al causarles decepción a los mismos”.
“Me remuerde la conciencia el no haber
seguido mi instinto, yo vi algo diferente en su mirada, sentí su
llamado de auxilio, pero fui un cobarde al no preguntarle directamente a
él que le sucedía, no tengo excusa que valga y este cargo de conciencia
no me deja tranquilo, tal vez por eso quiero que se conozca que paso
previo al asesinato de Lester”.
Sentencia de ejecución
Los tres testimonios anónimos
coinciden al decir que a Lester Ismael Moncada Ordóñez, del primero de
Bachillerato, habría sido expulsado por tenencia de droga (marihuana) y
que este joven sabía que de no devolver la droga a sus proveedores era
su sentencia de ejecución.
Por tal razón, durante su último día
de vida, Lester trató de convencer a las autoridades del ICVC, que le
habían decomisado días antes la droga, para que se la devolvieran, pero
sus suplicas no surtieron efecto.
Esta página de un periódico capitalino en la que reclaman por la falta de apoyo e
indignación por la muerte del joven fue distribuída por los estudiantes del Central.
Contradicciones
El Equipo de Investigación entrevistó a
Saúl Enrique Morales, representante de la Comisión Interventora
instaurada a finales del año pasado en el ICVC por disposiciones de la
Secretaría de Educación, según el Acuerdo 2291-2013. Morales manifestó
que el estudiante nunca le dijo que lo iban a matar si no devolvía la
droga. Sin embargo admitió, “él me
dijo que estas personas (traficantes) ya sabían que se le había
decomisado la droga y que tenía que pagarles el valor de la misma, por
esa razón yo le di 100 lempiras, 50 para pagar la marihuana y 50
lempiras para que se fuera en taxi directo a su casa”.
“La plática del miércoles (el día de
su expulsión) fue muy franca me pidió permiso para quedarse dentro del
colegio porque tenía que someterse a un examen y dijo que sería la
última vez que estaba involucrado en el tema de drogas. Este muchacho
mostraba sinceridad, nobleza y deseos de superación y me convenció, al
decir, que quería cambiar”.
El jueves Lester llegó a pedir otra
oportunidad en el colegio porque estaba más tranquilo pues supo que
habían apresado a quienes lo amenazaban. “Lester
vino a pedir una oportunidad y dijo que iba a cambiar, por eso
solamente se le suspendió verbalmente y no se firmó ninguna acta, además
se le permitió que se quedara en clases porque él nos dijo que estaba
siendo amenazado (obligado) para distribuir droga dentro del colegio y
en efecto al joven se le decomisó un paquetito de marihuana
aproximadamente de una pulgada de ancho, y de largo, esto fue el
miércoles antes de su muerte, de eso puede dar fe su tutora”.
“En el caso de Lester fue muy rápido y
no dio tiempo de actuar, solo fueron dos días por ello no se pudo
remitir el caso a las autoridades competentes, pero la droga será
remitida en los próximos días para que inicien la investigación”. El
abogado Morales consideró que el decomiso de la marihuana era sólo para
consumo. Empero en la misma entrevista expresó “a mi criterio al
muchacho lo agarraron como mula porque era un consumidor activo” y
tampoco esto fue reportado al Ministerio Público, que según el artículo
92 del Código Procesal Penal tiene la potestad de investigar hechos
punibles y promover la acción penal pública .
Por otra parte www.conexihon.hn,
corroboró a través de una conversación telefónica con el padre del
alumno Lester Ismael Moncada Ordóñez, que él y su esposa desconocían que
su hijo habría sido expulsado del ICVC. Además
la versión extraoficial de los alumnos del Central -en cuanto a que
junto a Lester también se habrían secuestrado dos alumnos más- fue
validada por el gobierno estudiantil del ICVC.
El cadáver de Lester Moncada fue hallado a inmediaciones de Plaza Milenium,
en el sector de Tiloarque en Comayaguela.
Tres centralistas asesinados este año
El gobierno estudiantil agrega que
según sus estadísticas en lo que va de este año son tres los estudiantes
del Central que han sido asesinados bajo el mismo patrón. El
asesinato del estudiante centralista ocurre en un contexto de
ejecuciones sumarias contra jóvenes y en el marco de denuncias de Casa
Alianza sobre el exterminio contra niños hondureños.
En los primeros cuatro meses del año, Casa Alianza denunció el asesinato extrajudicial de 352 menores de 23 años. Las
autoridades competentes del país deberán investigar la responsabilidad
civil y administrativa de quienes por acción u omisión no prestaron
importancia al llamado de auxilio del menor, Lester Ismael Moncada
Ordóñez porque en ninguna de las acciones realizadas por las autoridades
se involucró a la policía ni a la Fiscalía.
Los patrullajes a inmediaciones de
este colegio les corresponden a los integrantes de la Quinta Estación
Policial del barrio La Granja, que estuvo en 2011 en el ojo del huracán
porque varios de los policías de esta posta participaron en la ejecución
de los universitarios Carlos David Pineda y Héctor Alejandro Vargas
Castellanos, hijo de la rectora de la Universidad Nacional Autónoma de
Honduras. Los policías modificaron la escena del crimen y escondieron
evidencias para disimular la ejecución de los jóvenes.
Nota: al final de la nota del 6 de junio debe entenderse: fue raptado...
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