Tegucigalpa. Pobladores de patronatos de San Pedro Sula, pidieron ayer la destitución del fiscal general de Honduras, Luis Rubí, por no aclarar las muertes contra directivos de esas organizaciones y avalar el desalojo de residentes de varias colonias de la llamada “capital industrial”.
Tras haber recorrido varios kilómetros hasta llegar a la sede regional del Ministerio Público, los miembros de la Confederación Nacional de Federaciones y Patronatos de Honduras (Conafeph), exigieron que se separe del cargo al abogado Rubí, por la incompetencia que ha demostrado en sus funciones.
El presidente de Conafeph, Marco Antonio Bhaday, lamentó que “por la mala justicia que tiene el Estado, así como el pésimo accionar de los fiscales” y agregó que éstos estos “besan el puñal de oro y existen fiscales ejecutores que dejan mucho que desear, porque exigen el desalojo en colonias que ya están legales”.
En tal sentido, el directivo reclamó que se haga justicia en cuanto al respeto a la propiedad privada, la cual Rubí ha pasado por alto y ha preferido enviar a subalternos a fin de satisfacer la avaricia de los terratenientes de San Pedro Sula.
Vecinos de las colonias –aseguró– como Gracias a Dios de La Ceiba (Caribe), Samaritano de Choloma (Cortés), la Estancia en Santa Rosa, Copán, y otras localidades de la región noroccidental han sido desalojados sin que se haya presentado sustento legal para proceder.
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