martes, 30 de diciembre de 2014

Carta de fin de año para lectores (as) de EL LIBERTADOR

 Al borde del año, el Director Fundador de este periódico quiere compartir con Ustedes algunas reflexiones de permanentemente discusión interna, que rara vez o nunca hemos trasladado al exterior.
EL LIBERTADOR plantea una sociedad con carácter, inteligente, hondureña, alejada de fanatismos, solidaria con el prójimo, orgullosa del territorio, pues, en simetría que la sociedad sea segura y próspera, todas las personas estaremos en condición de altos estándares de existencia y calidad de vida.
Jhonny José Lagos Henríquez / Director Fundador de EL LIBERTADOR
En EL LIBERTADOR comprendemos que aburre y hasta tortura la inteligencia una política informativa insubstancial, estancada en el acontecer negativo de un pueblo y de la vida.-
Si alguien durante este año ha sentido eso de nuestro afán social, sinceramente, pedimos disculpas a todos y todas las que leen los contenidos que hemos publicado a través de EL LIBERTADOR IMPRESO MENSUAL, EL LIBERTADOR DIARIO DIGITAL y por las globales redes sociales de EL LIBERTADOR.- Sepan que la intención de nuestro trabajo que el 20 de mayo de 2015 cumplirá doce años aspira acompañar e impulsar los postergados sueños y proyectos de la nación hondureña.
Al borde del año, el Director Fundador de este periódico quiere compartir con Ustedes algunas reflexiones de permanentemente discusión interna, que rara vez o nunca hemos trasladado al exterior, entre otras: Los ideales y vergüenza patria que atendieron el nacimiento de EL LIBERTADOR, la filosofía que sustenta nuestra acción social como instrumento de contrapoder frente a la estrategia metódica de desinformación de la prensa tradicional y la innovación que hemos realizado hondureños, sin antecedente en la historia del periodismo nacional, de un sistema alternativo de información y un modelo gráfico capaz de competir y hasta superar la propuesta técnica y estética de los medios tradicionales impresos que, en su condición de arma ideológica de grupos fácticos locales y extranjeros, son la causa reproductora del rezago económico-político y miseria mental de Honduras.
Por eso quienes toman decisiones desde cualquier forma de gobierno atienden lo anónimo hasta que se vuelve público.- Lo que no trasciende por grave que sea, sino interesa al poder, se ignora.- Además, ha sido axioma de nuestro funcionario que “pecar en silencio no es pecar”, tal como inmortalizó “Moliere” la hipocresía en boca de Tartufo, y tendrá vigencia mientras haya autoridades y prensa insensibles al bien común.
El desarrollo de la informática, biología, neurología, de la sicología y sociología de la comunicación y de ciencias conexas que estudian el funcionamiento y comportamiento humano, elevaron el poder de los medios masivos a la “bomba atómica” de las guerras de cuarta y quinta generación.- Los ejércitos ya son obsoletos por caros, pesados y evidente violación de derechos civiles.
Ahora que escribo estas líneas pienso en esa superflua discusión acerca de qué es más importante ¿la política o la prensa? Ambas –junto al religioso— son factores vitales del poder ideológico donde yace el control social en todo régimen de producción económica. Con una diferencia, la política y el mejor plan político será el que bendiga la prensa, y no lo que prefiera el pueblo.- Se equivoca el que desconecta a uno de otro, son un todo.
Alguien bien intencionado que desde la política impulsara cambios estructurales para bien del Estado, de pronto, podría verse en la calle y un pueblo pidiendo su cabeza.- Entre mayor es el grado de ignorancia y pobreza de un pueblo son más eficaces las “armas silenciosas” de la prensa.- Ya lo vemos en Honduras desde 2009. Hoy las plataformas mediáticas son en el mundo el centro de operaciones y la estrategia para subyugar cerebros y botar gobiernos, o para instalar y promover tiranías que luego la gente vitorea. Si una sociedad no logra crear un sistema de prensa que comparta sus intereses con circuitos como EL LIBERTADOR vivirá “amando al opresor y odiando al oprimido” (“Malcom X”).
Les comentó que la construcción del proyecto base que más tarde originó EL LIBERTADOR llevó un año, en ese lapso compartí ideas con profesionales de distintas áreas científicas, viajé por el país buscando consejos y experiencias de antiguos editores y administradores de medios extintos para conocer el porqué de la quiebra, antes había estudiado contenidos (forma y fondo de sus publicaciones).
Algunos alimentaron el sueño, otros con justa razón decían que un deseo como EL LIBERTADOR estaba condenado al fracaso en Honduras. (Espero, si la vida me da un segundo más, escribir esta apasionante historia. Hoy, EL LIBERTADOR DIGITAL tiene un promedio de 30 millones de lectores en el mundo y EL IMPRESO esta en 17 de los 18 departamentos).- Les doy un dato, en el último medio siglo de historia de medios impresos en el país, han muerto todos los rotativos que surgieron junto a la prensa tradicional (cuatro diarios).- Sólo EL LIBERTADOR ha podido sobrevivir 12 años. La explicación está en que esos cuatro periódicos son propiedad y financiados por el poder real económico-político local y transnacional.- Son sus voceros, por eso jamás les importará la nación hondureña.
Tienen tanto apoyo financiero que en circunstancias especiales renuncian al flujo multimillonario que captan de gobiernos, por eso pueden crearles campañas de desinformación, incluso botarlos, cuando entran en contradicción con el capital.
En distintas épocas los compañeros que han formado EL LIBERTADOR, se han preguntado ante ese panorama, porqué el sector social del país no ha visto en EL LIBERTADOR un aliado clave a quien hay que apoyar para que potencie su función y compromiso con los anhelos del pueblo hondureño.- Ese era y es el objetivo desde que fundamos este rotativo, nosotros creamos la agenda a favor de la sociedad, pero sus teóricos representantes nunca nos incluyeron en sus programas.- La razón es obvia, pero la confirmé andando el camino que ya lleva más de una década.
Aquí, a solas, recuerdo el rostro de cada compañero y compañera que con serenidad y sin falsos gestos de sufrimiento han soportado instantes duros de la historia de EL LIBERTADOR.- Hemos velado solos nuestros muertos, hemos recogido a los torturados, y no tengo cómo compensar las largas horas en que abandonaron sus hijos, sus padres, sus familias y hasta sus vidas en aquellos meses de dictadura cuando por largas noches éramos el único medio que denunciaba la barbarie ante el mundo, ante el cierre forzado de Globo y 36.
Uno de esos días, EL LIBERTADOR recibió un regio homenaje que se convirtió en supremacía histórica, ha sido el único medio aplaudido y voceado por miles y miles de ciudadanos: el nombre retumbó esa noche en todo el centro de Tegucigalpa.
EL LIBERTADOR marca el principio del periodismo auténtico y moderno en Honduras. Dijo de este periódico, el célebre periodista colombiano Javier Darío Restrepo: “Este periódico casi es eterno”, después de leerlo en una de sus visitas al país. Y “EL LIBERTADOR es una propuesta única de América Latina y quizá en el mundo”, exclamó el presidente del Centro Internacional de Periodistas de Washington, Luis Botello.
EL LIBERTADOR plantea una sociedad con carácter, inteligente, hondureña, alejada de fanatismos, solidaria con el prójimo, orgullosa del territorio, pues, en simetría que la sociedad sea segura y próspera, todas las personas estaremos en condición de altos estándares de existencia y calidad de vida.
Me he extendido hablando con Ustedes estas inquietudes al final de este año. ¿Cuánto vivirá EL LIBERTADOR? eso depende del aprecio que la sociedad tenga de nuestra labor y del financiamiento que buscamos.- Más de una vez he pensado cerrarlo, más de una vez he recibido ofertas de compradores, pero he preferido subsistir creyendo que somos útiles para la población. De algo estoy seguro y es que si alguna vez cierro estas puertas, nadie aquí se reservó nada, sin esperar a cambio ningún reconocimiento.- Nadie nos pidió este esfuerzo, por eso nadie nos debe nada.- Seguiremos marcando huellas… 

http://www.ellibertador.hn/?q=article/carta-de-fin-de-a%C3%B1o-para-lectores-de-el-libertador



No hay comentarios :

Publicar un comentario