Tiempo.hn/ Viernes, 16 Enero 2015 -22:30 TEGUCIGALPA.-
El Comisionado Nacional de los Derechos Humanos, Roberto Herrera Cáceres, cuestionó que el Estado haya desentendido, desde hace varios años, la atención adecuada de los centros de privación de libertad para adolescentes infractores de la ley y que ahora estos tengan el control de los mismos.
El Comisionado Nacional de los Derechos Humanos, Roberto Herrera Cáceres, cuestionó que el Estado haya desentendido, desde hace varios años, la atención adecuada de los centros de privación de libertad para adolescentes infractores de la ley y que ahora estos tengan el control de los mismos.
El ombudsman hondureño lamentó los hechos violentos suscitados en los
últimos días que dejaron como saldo en el centro Renacimiento, personas
muertas y otros heridos y lesionados en su integridad física.
Herrera reveló que hay una serie de dificultades que la misma Comisión Interamericana de los Derechos Humanos (CIDH) puso de manifiesto desde el año 2006.
Mencionó para el caso que, en varios centros de detención no se distingue entre los menores que están sujetos a prisión preventiva y aquellos a los que ya se les ha dictado sentencia condenatoria.
Agregó que lo más preocupante es que los centros están bajo el control de los menores infractores cuando es el Estado es el que debería de asumirlo para hacer efectivas las medidas de rehabilitación.
Entendemos, dijo Herrera Cáceres, que todo el manejo de un centro de internamiento de menores debe implicar la seguridad de quienes allí se encuentran recluidos, de los custodios y de la comunidad que rodea el centro de detención.
Explicó que el objetivo es que esos centros no sean de violencia sino que sean socio educativos.
El CONADEH recordó que los problemas de los centros de detención datan aún antes del año 2000, pero que después de ese año se han ido acrecentando.
El CONADEH afirma que ha verificado una serie de hechos como la falta de personal capacitado para dirigir los centros.
Herrera reveló que hay una serie de dificultades que la misma Comisión Interamericana de los Derechos Humanos (CIDH) puso de manifiesto desde el año 2006.
Mencionó para el caso que, en varios centros de detención no se distingue entre los menores que están sujetos a prisión preventiva y aquellos a los que ya se les ha dictado sentencia condenatoria.
Agregó que lo más preocupante es que los centros están bajo el control de los menores infractores cuando es el Estado es el que debería de asumirlo para hacer efectivas las medidas de rehabilitación.
Entendemos, dijo Herrera Cáceres, que todo el manejo de un centro de internamiento de menores debe implicar la seguridad de quienes allí se encuentran recluidos, de los custodios y de la comunidad que rodea el centro de detención.
Explicó que el objetivo es que esos centros no sean de violencia sino que sean socio educativos.
El CONADEH recordó que los problemas de los centros de detención datan aún antes del año 2000, pero que después de ese año se han ido acrecentando.
El CONADEH afirma que ha verificado una serie de hechos como la falta de personal capacitado para dirigir los centros.
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